Páginas

martes, 12 de marzo de 2013

El odio hacia Chávez en los medios españoles. Antonio Naranjo en el programa de Julia Otero.

El fallecimiento del Presidente Hugo Chávez, ha puesto de manifiesto en España dos hechos de forma bastante nítida:
  • La solidaridad de la izquierda real con el proceso bolivariano de transformación social. 
  • El odio A) de la derecha española, B) de los medios de comunicación sistémicos, hacia la figura de Chávez. 
Desde IU (Izquierda Unida) a los partidos nacionalistas de izquierdas (BNG, Anova, ERC, CUP y EH-BILDU), junto con diversos movimientos y colectivos sociales de la izquierda, han mostrado su respaldo a lo que significó y significa Hugo Chávez y el proceso político abierto por el movimiento bolivariano encabezado por el PSUV. También se han escuchado voces, en su defensa, por parte de algún sector que podríamos etiquetar como socialdemocracia crítica, ubicada a la izquierda de lo que es el formato oficial socialdemócrata del PSOE. En definitiva, la izquierda española ha cerrado filas en torno a la figura de Chávez y con el proceso bolivariano, incluso aquellos que consideran que hay cosas que resultan criticables y que es necesario definir y concretar más a fondo el proceso de transformación social. 
Se trata del mismo consenso que se ha dado entre los medios alternativos de comunicación, que tratan de hacerse oír y van ganando terreno, muy poco a poco, gracias a Internet. A menudo, las redes sociales son la mejor publicidad de estos medios progresistas.

En relación con los medios sistémicos, resulta curioso el consenso generado entre aquellos que son más radical-conservadores y que apoyan al PP (La Razón, El Mundo, COPE, Intereconomía, las cadenas públicas de TV controladas por el PP, etc.), y aquellos otros aparentemente más "progresistas" y menos carcas, como es el caso de El País y la SER, que apoyan al PSOE.

Llama la atención que estos dos últimos medios de PRISA (El País y la SER) hayan perdido su tradicional sentido de la mesura y del disimulo al tener que informar sobre Chávez. Cuando se trata del líder de la revolución bolivariana, se difuminan las diferencias de estilo que suelen distinguir los medios de PRISA de los de la caverna. En lenguaje futbolístico,  podríamos decir que El País y la SER pasan a ser tan hooligans como La Razón o Intereconomía cuando se trata de hablar de Hugo Chávez. El artículo de Vargas Llosa del 11-3-13 en El País, La muerte de un caudillo, bien pudiera haber sido publicado, por ejemplo, en ABC sin que llegase a desentonar. O por La Razón, cuya portada a grandes titulares el día del fallecimiento de Chávez, reproducía casi el mismo título: "la muerte del caudillo".  Habrá que empezar a pensar que la figura de Chávez está revestida de una cualidad milagrosa o mágica: obra el milagro de que El País y La Razón, o la episcopal COPE o ABC..., establezcan una sintonía coral extraordinaria, una compartida y extraña identidad ideológica, una misma línea editorial fraterna y univocal (1). Creo que, quizás, tan siquiera la figura de Bin Laden fue tratada con tanta dureza y saña cuando fue asesinado, como se está tratando ahora la figura de Chávez en los medios sistémicos.


* * *
En algún caso, durante estos días hemos llegado a escuchar o a leer verdaderas barbaridades antichavistas. Hemos seleccionado un ejemplo de un programa radiofónico de considerable audiencia, dirigido curiosamente por una periodista que goza de cierto prestigio como progresista: el programa de la cadena Onda Cero, Tea Partydirigido por la popular periodista gallega Julia Otero

En los días 6 y 7 de este mes, el programa de Julia Otero entrevistó a los periodistas Antonio Naranjo y Máximo Pradera, uno en cada jornada. Son tertulianos fijos semanales del programa. El primero fue entrevistado por la propia Julia Otero. El segundo por la subdirectora del programa, Mari Carmen Juan, ya que la anterior se había puesto enferma.

He de comentar que este artículo incluía un apartado dedicado a deconstruir en detalle la intervención de Máximo Pradera en el día 7 de marzo. El programa alardeaba de imparcialidad y de pluralidad de puntos de vista en el tratamiento de la información sobre la figura de Chávez. La presentadora introducía la intervención de Máximo Pradera como alguien que adoptaba una posición pro-chavista, en contraposición al antichavismo expresado por Naranjo el día anterior. Personalmente opino que ese punto de vista "pro-chavista" de Pradera anunciado al comienzo de su intervención, no es tan nítido como se dijo; ni tuvo ese carácter compensatorio alegado por el programa para poder presumir de pluralidad. Sin embargo, entre los compañeros del blog había opiniones diversas y alguno no estaba de acuerdo con mi análisis y valoración. Por este motivo, finalmente opté por suprimir mis valoraciones sobre la intervención de Máximo Pradera, limitándome a facilitar la transcripción íntegra de lo que dijo y dejar que cada lector pueda evaluarla como crea conveniente. Si acaso hubiese interés y debate en los comentarios, podría insertar algunas de estas valoraciones en forma también de comentario.


Julia Otero
Antonio Naranjo es un tertuliano habitual en el programa de Julia Otero,  alineado con la derecha española más extrema, muy vinculado a la figura de Esperanza Aguirre (sector más neocon del PP); en momentos pasados, llegó a ser ensalzado con entusiasmo en Twitter por Cristina Cifuentes (delegada del gobierno del PP en Madrid, tristemente conocida por sus medidas represivas contra la libertad de manifestación y de expresión). 

Personalmente me resulta difícil encontrar palabras para calificar lo que fue la intervención de Antonio Naranjo el pasado día 6. Por consejo de alguna compañera del blog más comedida, autocensuré algunos calificativos que en principio utilizaba para referirme a este periodista.

Se puede acceder al audio de su intervención pulsando sobre este link (escuchar del minuto 6' hasta el final)Este popular tertuliano explayó todo su odio contra Chávez, llegando al extremo de establecer una comparación de  Hugo Chávez con Pinochet, Pol Pot, Videla y Hitler:
"Lo único que se puede decir en beneficio de Chávez es que (…) es menos malo, en términos de exterminios, que otros sátrapas como Pinochet, o como Pol Pot, o como Videla o como Hitler” (2)
Me gustarían que los lectores expresaran cuáles son los calificativos adecuados para evaluar semejante comparación (les invito a todos a dejar su comentario), ya que aquellos que yo empleaba decidí suprimirlos como antes dije. No creo que llegue con decir que Naranjo es parcial, exagerado, manipulador, difamador, tendencioso, malicioso... Todos estos calificativos se quedan muy cortos y no se ajustan a la gravedad de las palabras expresadas por el periodista.

Naranjo se queda todo ancho al afirmar:
"fue un dictador legitimado por las urnas, pero es una persona que llega al poder por un golpe de estado, que maneja el petróleo como una limosna para sus propios ciudadanos (...). Era un dictador que descubrió que podía seguir siéndolo con una retórica y una apariencia de democracia que en realidad no existía”. 
Además de lo anterior, Naranjo menciona la dura persecución que sufrió la prensa de Venezuela a manos de Chávez y continúa explayándose en su antichavismo. En un momento dado de esta entrevista, Julio Otero adopta el rol de abogada y le dice:
"Piensa una cosa. Aquella Venezuela pre-Chávez, gobernada por una alternancia en el poder... digamos... entre el PP venezolano y el PSOE venezolano, entre la socialdemocracia y los conservadores que se iban turnando en el poder, era una Venezuela en la que solamente los blancos, los blancos impolutos, pintaban algo. Era una Venezuela muy racista y que atendía solamente a los ricos. Y entonces creo que es interesante ponerse en al piel de los demás. Y entonces yo pienso: si tú fueras negro en Venezuela, o fueras indígena en Venezuela... ¿a quién ibas a votar?"
Naranjo, entonces, interrumpe bruscamente el final de las palabras de Julio Otero y, sin cortarse, le responde enfáticamente:
"¡ya, pero es que no soy ni negro, ni indígena ni ignorante!"
Es decir, implícitamente está afirmando una relación semántica entre "ser negro" o "ser indígena" y "ser ignorante", además de llamar "ignorantes" a los millones de venezolanos que votaron durante estos años por el PSUV de Chávez. Desde luego, la respuesta de Naranjo no tiene desperdicio: no es negro, no es indígena, no es ignorante... ¡no es chavista! 

Sin duda Julia Otero debió captó al instante la gravedad de las palabras de Naranjo, porque le corto también en seco, diciéndole:
"te estoy simplemente explicando que una corrupción galopante como la venezolana durante años y años trae esta consecuencia... Cuando a la gente indígena, que son una mayoría, cuando a la gente pobre que eran una mayoría y que seguramente siguen siéndolo, cuando a la gente de color... de colores mestizos, los tienes relegados a lo más bajo de la sociedad y a pasar hambre, pues si nos creemos que vale igual el voto del rico que el voto del pobre, que parece que sí, pues llega un momento en que se alían y votan a un tipo pues... porque están hasta las narices".
Le contesta Naranjo: "sí, pero una cosa es que ellos lo hagan y otra que nosotros lo compremos", niega indirectamente que esos pobres, mencionados por Julia Otero, sean "el votante medio", y termina afirmando ante lo que él considera una ausencia de libertad en Venezuela:
"al final, la gente que cree que es mejor vivir de rodillas que morir de pie, pues acaba muriendo de rodillas".

Antes de terminar su intervención, Naranjo critica que "Izquierda Unida haya despedido a Chávez como si fuese un héroe" y "que el propio PSOE haya tenido dudas al respecto".


Lo más penoso de este discurso antichavista es que está ampliamente extendido en los medios de comunicación sistémicos españoles. Llamo también la atención por un par de detalles protagonizados por Julia Otero, y que a mí personalmente me han parecido bastante desafortunados: 

En primer lugar, en un párrafo que no hemos transcrito, Julia Otero expresa enfáticamente su conformidad con la comparación que establece Naranjo "entre la despedida del dictador Franco y la despedida de Chávez" (minuto 8'50'' del audio). Yo a esto lo llamo condicionar a la audiencia en una dirección ideológica determinada y además desde la demagogia. Me gustaría saber si Julia Otero realizaría la misma comparación con la despedida que las masas de muchos países, han brindado a tantos líderes políticos y sociales por todo el mundo en diferentes momentos del pasado. Y cierto que la comparación la realiza Naranjo, pero ella, insisto, enfatiza su conformidad. 
En segundo lugar, en el párrafo que hemos transcrito un poco más arriba, en el que Julia Otero menciona cómo los pobres pasan a dar su apoyo a Chávez, fijaros que le llama despectivamente "tipo". Ya al principio, en un fragmento que no hemos transcrito porque es introductorio, comienza refiriéndose a Chávez también en términos de "era un tipo excesivo" (minuto 6'35'' del audio). Los diversos fragmentos en los que interviene la directora del programa hablando de Chávez en la entrevista, apenas duran 1 minuto en total. Pues en ese escaso minuto, en dos ocasiones Julia Otero se refiere a Hugo Chávez calificándolo de "tipo". 

En la pragmática lingüística habitual de Julia Otero en su programa y teniendo en cuenta los contextos de uso, el empleo que hace del término "tipo" es claramente peyorativo. Me gustaría preguntarle a esta periodista, cuando en sus programas lo utilizó para referirse a Rajoy, Rubalcaba, Obama, Merckel, etc. Nunca. Cuando alude a un personaje público respetuosamente, lo hace en términos de "este señor"/"esta señora". Parece que en su opinión, Hugo Chávez no merece ese mismo tratamiento de respeto. En cambio, cuando habla de políticos corruptos, de personajes públicos que son susceptibles de reproche y descalificación social..., sí utiliza el vocablo "tipo". Queda fuera de toda duda, el sentido peyorativo que tiene en este contexto particular y que viene a arrojar muchas dudas sobre la imparcialidad de la directora del programa. 

Ojalá los términos del discurso antichavista de Naranjo fuesen algo excepcional y anecdótico en los medios españoles. Por desgracia, sus palabras son el paradigma de la idea que propagan periódicos, radios y televisiones de nuestro país, en torno a la figura de Hugo Chávez.


*  *  *
Al día siguiente le tocaba el turno en el programa a Máximo Pradera, participando en lugar de Julia Otero, enferma ese día, Mari Carmen Juan  (subdirectora del programa). Se puede acceder al audio desde este link (escuchar del minuto 2'20'' al 9'). Como ya expliqué, he suprimido mis valoraciones sobre esta intervención y me limito a facilitar la transcripción de la intervención de Pradera, prácticamente en su totalidad (falta algún fragmento irrelevante). Cada cual que evalúe a su antojo:
"Ayer le escuché una frase que ni siquiera como provocación se la admito a Naranjo. Dijo: 'Chávez convirtió la miseria en una excusa para ser un dictador legitimado por la urnas'. Es decir, que todo el todo el esfuerzo de alfabetización llevado a cabo por Chávez en Venezuela y por sacar al país de la miseria, era una especie de capa de maquillaje, detrás de la cual se encubría su ambición personal de ser un 'gorila rojo' haciendo lo que le daba la gana. Y sobre todo se puso mucho hincapié [se refiere a la anterior entrevista con Naranjo] en el maltrato hacia los periodistas en Venezuela...  ¡Claro! Primero que hay una especie de superioridad moral absurda de las democracias europeas hacia las democracias de América Latina como diciendo… 'bueno, nosotros hemos inventado esto y vosotros tenéis todavía una forma de democracia y de libertades civiles muy poco desarrollada'. Fíjate... Viene la crítica desde un país como es España donde los periodistas se tienen que ganarse a pulso, día a día, el derecho de poder hacer una pregunta en una conferencia de prensa, como ocurrió el otro día con Ana Mato en Naciones Unidas, que se tuvieron que plantar todos los corresponsales para hacer una sola pregunta… Un país donde las conferencias de prensa de triple S (de Soraya, Sáenz de Santamaría) los viernes, El País llevaba sin poder preguntar... porque el sistema es a dedito y la seño te tiene que decir 'tú, tú puedes preguntar', y si no te apunta la seño con el dedo no puedes preguntar... llevaba no sé cuántas semanas sin poder preguntar el principal diario de este país. Es decir, las críticas a la libertad de información y a la libertad de prensa vienen de un país donde está ocurriendo esto."
"No tenemos ni idea de lo que es el papel de las empresas de comunicación en América Latina; es decir, no son como las empresas de aquí. Los grandes holdings de comunicación en América Latina, están ligados al golpismo, a la desestabilización,  a la protección del capital… es decir, son auténticos lobbys al servicio de intereses oscuros y claro, cuando llega un presidente como el presidente de Ecuador, Rafa Correa, o como el propio Hugo Chávez, y empiezan a poner límites a esa especie de mal entendida libertad de prensa que en realidad es libertad de difamar a quien quieras (…) [Entonces] uno se plantea si no tendrá razón Rafael Correa de que realmente hay que hacer una nueva ley de prensa, en Ecuador o en Venezuela, para poner límites a ese abuso. Quiero recordar las palabras de Rafael Correa en esta entrevista:
[audio de Rafael Correa] Derrumben esos mitos, esos estereotipos de los políticos malvados persiguiendo a pobres periodistas, a pobres medios de comunicación. ¡¡Es al revés!! Esos medios de comunicación son los que han respaldado la dictadura, los que han callado con las represiones, con los atracos bancarios, etc., y son los que persiguen a los gobiernos que realmente queremos cambiar las cosas. Desmitifiquen eso, por favor [fin audio de R. Correa].
Claro! Es que la prensa no siempre desempeña el mismo papel en todos los países (…) Depende del país que elijas y del continente que elijas, los medios de comunicación juegan un papel u otro. Y esto hay que dejarlo bien claro."
Toma la palabra Mari Carmen Juan, para decir: 
 "Bueno, yo creo que los oyentes de Julia en la Onda, pueden sentirse satisfechos porque en este programa han oído voces muy críticas respecto a Hugo Chávez, y voces no tan críticas respecto a Hugo Chávez. Lo que sí está claro es que es un personaje creo que también anguloso, que no se puede reducir a un es bueno o es malo; no todo es blanco o negro en la gestión de Chávez en Venezuela, y la verdad es que son países muy complicados, con una historia muy complicada, y con una situación muy complicada. Por tanto, bueno, quédense cada uno con la lectura que quieran hacer, pero que al menos se den cuenta de que intentamos la máxima pluralidad en este programa".
Acto seguido, la subdirectora del programa, le pregunta al tertuliano:
"Por cierto y hablando del futuro en Venezuela ¿Crees que el chavismo después de Chaves tienen buena salud o puede tener problemas…?". 
Contesta Máximo Pradera:
"[Con tono de dudas] ... Sí... sí... Parece ser [<--se ríe-->] que lo ha dejado todo atado y bien atado. Pero bueno... está también... cuando hablamos de todo atado y bien atado, está sonando a dictadura... Al próximo presidente de Venezuela lo tienen que elegir, lo tienen que votar, no es como en la época de Franco..., porque lo de atado y bien atado es una expresión que asociamos a una dictadura sin elecciones... Yo creo que el trabajo de Chávez y de todos los nuevos dirigentes que hay ahora... con Rafael Correa a la cabeza, que están luchando por la alfabetización en América Latina y por los derechos de los campesinos, y por mejorar las condiciones de vida que son infames, pues eso va a tener un respaldo, va a tener un respaldo..., y que además América Latina ahora mismo, como decía Felipe González el otro día en una charla que dio, está en el lado bueno del mundo; es decir, si alguien quiere huir de la crisis, el mejor continente ahora para trasladarse es América Latina."

Aquí termina la intervención de Máximo Pradera en relación con Chávez y, a continuación, pasan ya a charlar de otros temas diferentes.

*   *   *

Un apunte final al margen de todo lo anterior. El poder de manipulación de los medios es realmente impresionante. Son los grandes instrumentos para la socialización política de los ciudadanos. Son los mecanismo a través de los cuales la ideología dominante se reproduce. Son los grandes modeladores de la conciencia social. Dibujan nuestra visión del mundo y de la realidad.
Pero no siempre los medios y periodistas más proto-fascistas, reaccionarios, ultras, carcas... son los más peligrosos. Más bien al contrario. Las verdaderas fontanerías mediáticas del sistema, son más sutiles, más imperceptibles, a menudo revestidas de rostros amables y simpáticos que llaman a nuestra puerta y ganan nuestra confianza; con pedigree de aparente pluralidad e imparcialidad, de sonrisa inmaculada y seductoramente progresista, pero que nos manipulan sin que nos demos cuenta. Esos son los medios más peligrosos. A los primeros los vemos venir, enseguida identificamos sus mentiras y no dejamos que se acerquen al jardín. Estos otros, en cambio, a los que a menudo invitamos a tomar el té en nuestro salón, son maestros de la manipulación subliminal e indirecta. Sus contenidos con frecuencia son capaces de traspasar nuestros filtros críticos mentales, con la misma facilidad que una bala atraviesa una manzana al ser disparada. Los muchos Jiménez Losantos que hay, no son, ni mucho menos, los más tóxicos. 


NOTAS.-
(1) El citado artículo de Vargas Llosa en El País, lo están publicando también los periódicos más reaccionarios y de derechas de América Latina. Por ejemplo, en Argentina lo publica La Nación; en Perú La República, etc. .
(2) El fragmento completo dice: "Lo único que se puede decir en beneficio de Chávez es que procedía de un país en el que la corrupción de gente como Carlos Andrés Pérez (por cierto muy amigo de Felipe González en aquellos tiempos) era rampante, que el partido de la oposición a Carlos Andrés Pérez era como él, y que además es menos malo, en términos de exterminios, que otros sátrapas como Pinochet, o como Pol Pot, o como Videla o como Hitler” (minuto 6'54'' a 7'20'') 

APÉNDICE. Uno de nuestros compañeros del blog, comentando por mail el borrador de la entrada, me decía: "Se podía repasar el editorial del periódico estrella del grupo PRISA, El País, el 13 de abril de 2002, cuando intentó el golpe de estado contra el proceso bolivariano un grupo militar-empresarial". Y me adjuntó el enlace. Yo ya no recordaba ese editorial de hace 11 años y volví a leerlo. Realmente resulta muy significativo del antichavismo radical y obsesivo del grupo PRISA. Invito a los lectores a leerlo pulsando sobre este link. También recomendamos, en relación con este golpe de estado, el artículo de José Manuel Fernández La colaboración de España y EE. UU. en el golpe de estado en Venezuela de 2002, publicado en la revista Sinpermiso con fecha 10-3-13.

OTRAS ENTRADAS DEL BLOG RELACIONADAS
Nada será igual en Venezuela (de Barón rojo)
Hay fotos que intentan matar: "El País" con la de Hugo Chávez (de Manuel G.). 
La campaña antichavista y antibolivariana de los medios españoles (de Vigne)

7 comentarios:

  1. Nuestro colega Vigne no es el único que valora la pretendida "neutralidad de los medios progresistas españoles" respecto al presidente Chávez.
    Es muy interesante leer la reflexión del Dr. Vicenç Navarro en Público hoy mismo: http://blogs.publico.es/vicenc-navarro/2013/03/12/los-medios-espanoles-y-la-deseada-muerte-de-chavez/
    Y en este enlace tenéis acceso al artículo sobre Chávez publicado por el presidente Lula en el New York Times:
    http://www.nytimes.com/2013/03/07/opinion/latin-america-after-chavez.html?pagewanted=all

    ResponderEliminar
  2. La defensa de Máximo Pradera me parece muy suave ante los ataques de Antonio Naranjo. Habla poco de Chávez y de Venezuela, y sin embargo generaliza a otros países, cuando había argumentos suficientes para rebatirle. Por ejemplo cuando dice que Chávez llegó al poder por un golpe de estado. Chávez intentó un golpe de estado en 1992, estuvo en la cárcel y fue indultado, y llegó a la presidencia en una votación democrática en 1998.
    Creo que en realidad no es "odio hacia Chávez" lo que tienen los medios españoles. La realidad es que ven peligrar sus intereses económicos. Muchas de esas empresas tienen invertidos capitales en diversos países sudamericanos, donde sacan muchos beneficios, y ahora con la ola democratizadora de esos estados, ven en peligro mucho dinero.
    Lo que sí digo es que si nos ponemos a escribir sobre el trato de los medios españoles en este tema podríamos escribir un tratado de 200 páginas.

    ResponderEliminar
  3. Lo más terrible, al menos para mi, no es qué "tipejos " como Naranjo o Pradera tengan más o menos odio al proceso bolivariano en América Latina, lo qué más me preocupa es qué "tip@s" qué sé denominan periodistas sean tan ¿torpes? en sus entrevistas y respondan a los intereses de las empresas qué les pagan en lugar de ser lo qué tendrían qué ser...periodistas...la prepotencia con qué suelen tratar a las personas qué les cuestionan (Ana Pastor & Rafael Correa), da vergüenza ajena.

    Pienso qué el odio qué destila el grupo Prisa, qué le llevó a aplaudir un golpe de estado en Venezuela, sé debe fundamentalmente a qué el poder qué directamente o a través de oligopolios desempeñaba en América Latina sin cortapisas de ningún tipo, sé vio alterado por la llegada de Hugo Chávez, ejemplo, el grupo Santillana dueño y señor de los libros de texto en casi toda América Latina y qué sé vio relegado en Venezuela, de repente estos empresarios ya no tenían el beneplacido de los gobiernos títeres qué hasta ahora habían estado y no sé lo perdonaran jamás, y como eso otras cosas, de hecho los periódicos sucursales de Prisa van teniendo pérdidas cada vez más cuantiosas....así qué parece qué esta claro unos y otros a quién defienden.

    Vichi

    ResponderEliminar
  4. Estoy muy de acuerdo que los discursos más desinformantes son los que nos presentan esos rostros amables del sistema con toques subliminales que digerimos sin darnos cuenta. Como cuando nos comemos un pastel delicioso sin saber que contiene colorantes artificiales perjudiciales para la salud, y nos llegamos a enfermar sin saber por qué. No sólo hablo de medios informativos sino de personajes, productos mediáticos supuestamente contestatarios y me llega a la memoria un programa de un follonero todavía vinculado a Buenafuente que fué enviado a Venezuela. Este periodista-cómico o cómico metido a periodista, se presento en un acto protocolario de recibimiento de Chávez a Ahmadinejah, allí estaba con cámara y micrófono gritándole a Chávez intentando llamar su atención, La respuesta de Chávez fue saludar con la mano y con una sonrisa aquel "No me rompas el protocolo chico". Esto fue lo que vimos y que fué envuelto con comentarios de estar pasando mucho miedo, de haber sido amenazado personalmente por un ministro, de ridiculización hacia la guardia que estaba presente, todo esto en clave de humosr. Nos comimos el dulce con un sabor subliminal de amargura que no percibimos si no estamos en guardia, si nos coge relajados para echar unas risas y nada más. Esta es la peor forma de adoctrinamiento, la que de una forma incesante te inyecta veneno contra lo que no conviene que concuerdes; y va y llega un día en el que una persona habla mal de un líder como Chávez y cuando le preguntas en qué se basa te contesta "Porque sí, porque es así y ya está". Pues bien, yo me asombro cuando veo entrevistas a venezolanos de a pie y saben muy bien lo que es una campaña mediática, cómo funciona y para qué la hacen, en una gran mayoría han abierto los ojos, están en guardia y vacunados. Creo que esta vacuna es la semilla para que un pueblo sea libre y más quisiéramos los españoles que la hubieran sembrando en nuestra sociedad, porque ahora mismo no estaríamos en casa esperando que pase la crisis como lo intentan los medios con su dosis de veneno diario.

    Estado Monagas

    ResponderEliminar
  5. Perdón el recibimiento era a Lula da Silva. Aquí está el enlace http://www.youtube.com/watch?v=DFdqM6yOyj0

    Estado Monagas

    ResponderEliminar
  6. Totalmente de acuerdo con el análisis (me ha encantado). Yo también lo vi en su momento. Lo mismo hacían con ahmadineyad, por poner un ejemplo, o Fidel Castro. Hay una dialéctica de la que nadie se atreve a salir e, incluso algunos que supuestamente son más progresistas o imparciales, dan por ciertas, implícitamente, algunas propaganda de los medios de comunicación (fieles a sus intereses y a EEUU en general)

    Es que incluso, de ser cierto todas las acusaciones sobre chávez, fidel o el presidente de irán, hay otros personajes como Netanyahu (presidente de israel) que realiza atrocidades día a día y se vende como presidente de país democrático, las cuales no muestran en los medios o las justifican sistemáticamente. Ahí radica la diferencia: unos hechos son justificados o tratados como "respuestas" y otros se muestran como ataques en sí.

    Me gustaría echarais un vistazo a este artículo que, con otras palabras, viene a decir lo mismo:
    "¿Cómo saber si eres un rebelde, de la resistencia o un terrorista?"

    http://www.autocritica.es/eres-rebelde-de-la-resistencia-o-terrorista

    Aquí otro ejemplo de alguien que se las da de adalid de la imparcialidad y, en algunos casos, se hace caquita encima:
    "Carta abierta a Jordi Évole: Salvados en Palestina"
    http://www.autocritica.es/jordi-evole-2

    ResponderEliminar
  7. por cierto, me gustaría compartir otro artículo que también habla sobre la peligrosidad de los lobos con piel de cordero (véase pilar rahola), en este caso trata sobre los sionistas supuestamente más moderados:
    "Mentiras Sionistas"
    http://www.autocritica.es/mentiras-sionistas-2

    ResponderEliminar

ROGAMOS QUE LOS COMENTARIOS SE AJUSTEN AL TEMA TRATADO. En la pág. FAQ (ver pestaña "FAQ" en el menú superior), en el punto 6 encontrarás las normas y criterios de aplicación para la publicación de comentarios. Subrayamos especialmente: no se aceptan comentarios que supongan una expresión de machismo, misoginia, sexismo, homofobia, racismo o xenofobia, y tampoco comentarios que supongan una apología, directa o indirecta, del fascismo en cualquiera de sus variantes.
Para contactar con el blog por otras cuestiones, más abajo figura una dirección de e-mail en formato de imagen.