Prensa canalla. A propósito de la portada de La Voz de Galicia del 14D.

"No estamos hablando de periodismo sino de propaganda de guerra moderna"

(Adolfo Ferrera, en "La yihad mediática occidental queda al descubierto en Alepo")

"En Siria, el asesinato y el extremismo se han presentado como resistencia y revolución, y los que luchan para proteger a los civiles del terrorismo son presentados como terroristas"

John Wight, en "Siria y el guardaespaldas de mentiras"

Prensa canalla

El periódico La Voz de Galicia es el 4º periódico generalista del Estado en nº de lectores (579.000 lectores diarios), solo superado por El País, El Mundo y La Vanguardia, según datos (EGM) de junio de 2016. Esto sin contar los lectores de la edición digital. La Voz es omnipresente en los bares gallegos, el periódico por excelencia que uno puede leer en cualquier bar en el que entre. Pertenece al llamado Grupo Voz, propiedad de Santiago Rey Fernández-Latorre. 

Esta corporación mediática manda y ordena en Galicia. Mimada por el PP gallego, el Grupo Voz se ha beneficiado durante años de millones de euros procedentes de las arcas públicas, a través de subvenciones y procedimientos variados. La Voz de Galicia es el ejemplo perfecto de la simbiosis entre los medios y el caciquismo-clientelismo del PP. Chupa de la teta pública a través de las generosas inyecciones económicas que recibe de la Xunta; pero, al mismo tiempo, protege a su partido de referencia, el Partido Popular. De hecho, la existencia de La Voz de Galicia es clave para entender porqué el PP sigue ganando las elecciones en Galicia. Durante el bipartito PSdeG-PSOE/BNG, el gobierno de Touriño tuvo en la mano hundir de una vez por todas esta fábrica de manipulación y mentira, que es La Voz; pero a Touriño le entró el miedo y, al final, La Voz no tuvo compasión con él, atacándolo con una mezquina e injuriosa campaña de prensa que facilitó el regreso del PP a la Xunta.

La miserable portada de hoy

La Voz calla sobre Yemen y calla y ha callado sobre la barbarie y el salvajismo del terrorismo yihadista en Siria. Para La Voz, igual que para los demás medios del establishment, los terroristas islámicos son "rebeldes", "oposición moderada". En su apología de la narrativa oficial de Washington, el periódico siempre se ha sumado a la calumnia que busca presentar al gobierno sirio como una encarnación de un diablo de la iconografía medieval. Pero lo de hoy ha batido récords, ha superado cualquier registro de la mentira y de la manipulación periodística. La portada de la edición impresa de La Voz de Galicia, del 14 de diciembre de 2016, no puede ser más miserable y canallesca, con el siguiente titular:

"Fusilamiento de mujeres y niños casa por casa en la toma de Alepo"

Portada edición impresa de La Voz de Galicia, 14-12-2016

Posiblemente muchos lectores no lleguen a leer el cuerpo de la noticia, pero ese titular se habrá grabado con fuego en sus manipulables mentes. El cuerpo  de la noticia es de la periodista Rosa Paino (@RosaPaino), que se ocupa de la información internacional. Si el titular es obra suya o es obra de alguien que está por encima de ella, es un hecho que desconozco.

Llama la atención que el titular no figure en la edición digital, como puede apreciarse a continuación:

El titular de la edición digital: no se han atrevido a mantener el de la edición impresa.

No es que el titular de la edición digital no manipule y no mienta, que también lo hace, pero ha ajustado el nivel a las mentiras "estandarizadas" por la prensa occidental. ¿Por qué La Voz no ha mantenido el titular de la edición impresa? Quizás se hayan dado cuenta que se han pasado con la mentira. En cualquier caso, el titular ha quedado grabado en la mente de todos los gallegos que hoy hayan visto la portada de la edición impresa.

Escribía recientemente John Pilger, en "Por dentro del gobierno invisible: guerra, propaganda, Clinton y Trump":

El portavoz de prensa de George Bush llamó una vez a los medios de comunicación "facilitadores cómplices". Viniendo de un alto funcionario de una administración cuyas mentiras, facilitadas por periódicos y cadenas de televisión, han causado tanto sufrimiento, esa descripción es una advertencia de la historia.

A la atención de La Voz de Galicia y de su redactora de "internacional": sois "facilitadores cómplices" de la barbarie yihadista, del terrorismo islámico apadrinado desde las alcantarillas del Poder.


Apostilla 15-12-2016

Puede leerse el cuerpo de la noticia, tal cual aparece en la edición digital, pulsando aquí.

En el texto de la noticia, Rosa Paino ya no menciona el "fusilamiento de mujeres y niños casa por casa en la toma de Alepo", que aparece en portada como titular resaltado. En su lugar se refiere a "atrocidades cometidas contra civiles por las fuerzas leales a Bachar al Asad". ¿Qué fuentes utiliza la periodista Rosa Paino para documentar tales "atrocidades"? Se basa en cuatro fuentes:

1ª) Deja caer que Francia y RU, cuyos gobiernos son de sobra conocidos por ser la quinta esencia de la imparcialidad (sarcasmo, entiéndase), han pedido una reunión del Consejo de Seguridad para tratar los informes que hablan de tales atrocidades. ¿Qué informes? No los menciona. Sencillamente otorga credibilidad absoluta a las delegaciones diplomáticas de Francia y RU en la ONU.

No está de más recordar una de las muchas perlas que la  delegación francesa en Naciones Unidas nos ha brindado sobre Siria, y que ejemplifica el rigor e imparcialidad del gobierno francés. La siguiente es una información que la cuenta oficial de Twitter de Francia en ONU difundió el pasado 26 de septiembre, mostrando supuestas pruebas gráficas de la destrucción de hospitales en Alepo:

La fotografía utilizada por la cuenta oficial de la delegación diplomática francesa en ONU, nada tiene que ver con Siria, ni con hospitales ni es una foto reciente. Se trata de un barrio palestino de Gaza, en el que varios edificios y una mezquita fueron destruidos en un ataque de la aviación israelí a principios de agosto de 2014, como puede apreciarse aquí:

En detalle la referencia que aparece arriba a la derecha:

2ª) Posteriormente en su artículo,  la periodista Rosa Paino vuelve a insistir en que que "La ONU denuncia (...)", y otra vez sin concretar ni dar detalles, si bien luego cita como fuente a un diplomático británico, Rupert Colville, que al final resulta ser la fuente principal a partir de la cual redacta buena parte de la noticia. Es decir, una persona que representa los intereses del gobierno británico. Sin duda, recurrir como fuente a un miembro de la diplomacia británica, es de una solvencia y rigor tremendos (sarcasmo de nuevo).

3ª) En tercer lugar recurre, también como fuente, a las declaraciones del Primer Ministro francés, Bernard Cazeneuve, de quien toma esta declaración: "Los hombres menores de 40 años son detenidos y enrolados a la fuerza en el Ejército sirio y a veces ejecutados". Considerar como fuente una afirmación no documentada de un líder político alineado con la política de Washington en Siria, sin duda la periodista de La Voz debe considerar que resulta muy riguroso (más sarcasmo).

4ª) La cuarta y última fuente a la que hace referencia la periodista, tiene que ver con las declaraciones recogidas por EFE del (así aparece citado en el artículo) "general opositor Ahmed Berri", curiosa forma de referirse a un terrorista sanguinario. Albay Ahmed Berri es Jefe Militar del Free Syrian Army y fue responsable máximo de la masacre de Aqrab en diciembre de 2012, durante la cual fueron asesinadas más de 300 personas por su condición alauita. Aunque el llamado "Observatorio Sirio para los Derechos Humanos" culpó al gobierno sirio de la matanza, posteriormente incluso periodistas occidentales reconocieron que había sido obra del FSA bajo el mando de Ahmed Berri, cuyas palabras son convertidas en fuente dotada de credibilidad por Rosa Paino en su artículo.

En definitiva, las supuestas fuentes de la periodista tienen que ver con las diplomacias francesa y británica (que tampoco concretan detalles ni explican en qué basan sus afirmaciones), con la acusación no fundamentada del Primer Ministro francés y con una acusación lanzada por el jefe del FSA responsable de la masacre de Aqrab.

*

También resulta curioso que entre los "grupos rebeldes", como los califica Rosa Paino, figure "Nuredin al Zinki", al que se refiere como "influyente grupo". Formado a finales de 2011, el grupo Harakat Nour al-Din al-Zenki recibió generosa ayuda de la CIA, pero también de Arabia Saudita. Entre 2014 y 2015, EE.UU. facilitó a esta organización misiles antitanque BGM-71 TOW. 

El grupo, relacionado con el  Frente Islámico (salafistas y yihadistas), ha llegado a ser acusado de crímenes de guerra incluso por una ONG generalmente alineada con los intereses de EE.UU. y UE y hostil a Rusia y Siria, como es Amnistía Internacional. Harakat Nour al-Din al-Zenki, junto con el Frente Levante, el Frente al-Nusra y otros grupos, estuvo implicado en el secuestro y tortura de periodistas y trabajadores humanitarios en la Alepo entre 2014 y 2015. En julio de 2016, fue difundido un vídeo que mostraba a combatientes de esta organización mientras decapitaban al niño palestino de 12 años Abdullah Tayseer. Posteriormente, "la organización condenó el asesinato y declaró que había sido una "equivocación individual que no representaba la política general del grupo", y que habían detenido aquellos que estaban implicados" (Wikipedia).

Abdullah Tayseer, de 12 años, poco antes de ser decapitado por miembros de "Nuredin al Zinki", el "influyente grupo rebelde" como lo califica la periodista de La Voz de Galicia.  Por ser contrario a la política de este blog, renunciamos a poner imágenes explícitas de este monstruoso asesinato. El que quiere ver el vídeo está disponible aquí, aunque advertimos que las imágenes no son aptas para personas sensibles.

También en el mes de julio del presente año, el grupo bombardeó un parque público en una zona liberada de Alepo en la que no había ninguna presencia militar, matando una docena de civiles e hiriendo a casi medio centenar. Igualmente, esta organización terrorista ha sido acusada de utilizar armas químicas en un barrio residencial cercano al sector de Salah al Din, en Alepo.