Aclaración importante

ACLARACIÓN. El blogdelviejotopo no está relacionado con la revista El Viejo Topo. Pese a utilizar también la metáfora "viejo topo" en el nombre, el blog es completamente ajeno a la revista, cuya dirección es www.­elviejotopo.­com / Sobre el significado del término "viejo topo" en la tradición marxista, consúltese http://blogdelviejotopo.blogspot.com.es/2013/06/el-termino-viejo-topo-en-la-tradicion.html

viernes, 15 de julio de 2016

Ahora le toca sufrir a los blancos. Mi recuerdo del 11S viviendo en Mozambique.


Ayer tuvo lugar un ataque terrorista en Niza, con un saldo de cerca de 90 muertos. Nuevamente la opinión pública ha entrado en shock y las muestras de solidaridad inundan las redes sociales. Sin embargo hay voces -me incluyo entre ellas- que se preguntan porqué no se produce esa misma solidaridad ni se entra en shock cuando esos mismos terroristas golpean salvajemente fuera de Europa. Un tuitero, ‏@chselles, publicaba un tuit que debiera obligarnos a reflexionar: "No sólo Niza, atentados en julio: -Kenya -Irak -Siria -Somalia -Afganistán -Nigeria -Libia -Bangladesh -Mali -Pakistán -Yemen -Arabia Saudi"

La piel de nuestra sensibilidad es muy blanda en unos casos, y muy dura en otros, como si hubiese víctimas de primera y de segunda categoría. La mayoría de quienes ahora expresan su dolor y solidaridad con las víctimas de Niza, mostraron indiferencia cuando, por ejemplo, el ISIS asesinó a casi 150 personas en acciones terroristas a finales de mayo (uno de tantos atentados terroristas del yihadismo en Siria). 

Este doble rasero moral tiene su equivalente en el tratamiento de la información que realizan los medios de comunicación. Como botón de muestra, el titular de ayer noche de El País sobre lo sucedido en Niza y el titular del mismo periódico cuando el atentado terrorista del ISIS que antes mencionaba:



Otro ejemplo (tomado de @Hakauati en Twitter):




Al hilo de los sucesos de ayer y de todo cuanto estamos viendo, me gustaría reproducir un fragmento de una entrada publicada hace tiempo, en el que narro cuál fue mi vivencia del 11S desde Mozambique. Menciono cosas que me impactaron profundamente en su momento y que ahora me gustaría compartirlas de nuevo con vosotros. En mi caso fue motivo de reflexión profunda. He intentado proyectar tal vivencia y reflexión en palabras. En los años posteriores, aunque nunca fue un tema de mi investigación en Mozambique, mi reflexión continuó, viviendo ya en una zona musulmana del norte del país, intentando comprender la rápida propagación de Africa Muslims Agency, una organización financiada por las monarquías del Golfo y que, en mi opinión, tenía que ver con ese vasto, laberíntico y complejo movimiento al que genéricamente le poníamos la etiqueta de Al-Qaeda.

*


En la tarde del 11 de septiembre de 2001, regresaba a Maputo desde la isla de Inhaca, situada en la entrada de la bahía de la antigua Lourenço Marques, como se denominaba a la capital de Mozambique en la época colonial. Tras zarpar, después de un tiempo busqué acomodo en la sala cubierta del ferry, huyendo del sol abrasador. Dentro había un monitor de TV funcionando, en el que comencé a ver extrañas imágenes del World Trade Center de Nueva York. Al principio pensé en alguna película de catástrofes, pero enseguida entendí que se trataba de otra cosa. Durante el resto del trayecto apenas pude retirar la mirada del monitor de TV. Desembarcamos y, sin dejar de pensar en lo que había visto, deambulé durante un buen rato por la Baxa, el antiguo barrio colonial convertido en una metáfora del contraste entre miseria y opulencia africanas. Algunos automóviles conducidos por gente de aspecto árabe, circulaban haciendo sonar las bocinas. Comprendí que era un gesto relacionado con el suceso del World Trade Center. 'Filhos de puta... merda de moinhés', pensé. En muchas regiones de Mozambique, denominan moinhé a aquellos que son de origen árabe, aunque por extensión también se utiliza el término para referirse a los que son de países musulmanes del sureste asiático.

Cuando llegué a mi barrio, Maxaquene, ya todo el mundo estaba enterado de que había sido un atentado terrorista. Todavía desconocía los detalles y entre unos y otros me pusieron al corriente. Me sorprendía contemplar como en Maxaquene, un barrio de pobres entre los pobres, la gente había digerido la noticia: unos con una reprimida excitación complaciente; otros con un júbilo nada disimulado. Escuchaba expresiones como "los blancos también sufren",  "ahora le toca sufrir a los blancos". "Es gente inocente la que murió" le espeté a uno. "En la guerra siempre muere gente inocente", me respondió. Estaba claro que aquello era percibido como un episodio más de una guerra global, en la que el "malo" era EE.UU.

Tardé en encontrar la lógica de la reacción social, la misma que se dio en los demás barrios de Maputo. Los mozambicanos nativos del sur -genéricamente conocidos como maxanganas- no sentían especial simpatía por los árabes (moinhés), tan siquiera por aquellos de nacionalidad mozambicana (me gusta utilizar más la voz lusa "mozambicano" que "mozambiqueño", término correcto en castellano). La población de origen árabe en buena parte monopoliza el comercio y se caracteriza por mostrar un trato de superioridad y de desprecio por los locales. "O moinhé é racista", se escucha a menudo. Cuentan que a veces pegan a sus empleados; en realidad se cuentan cosas peores sobre todo de las mujeres empleadas por ellos, pero prefiero omitirlas. En mi lógica, los maxanganas deberían haber mostrado repudio por el atentado; además mayoritariamente, los maxanganas son cristianos. Pero fue todo lo contrario.

En los años siguientes pasé largas temporadas anuales en el norte del país. Una de las cosas que me sorprendió en Mozambique después de 2001, fue que el país se llenó de motivos laudatorios de Bin Laden y del ataque a las torres gemelas del World Trade Center: camisetas y capulanas (tela utilizada como falda por las mujeres) con el rostro de Bin Laden o con éste y dibujos de las torres gemelas ardiendo, inundaron todas las esquinas del país. Hasta en aldeas remotas se podía encontrar tal iconografía, como muestran las dos fotografías que reproduzco, sacadas en una pequeña aldea de la provincia de Cabo Delgado:


En una aldea de Cabo Delgado. "Capulana" con la figura de Bib Laden, sobre un fondo en el que se han representado las torres gemelas ardiendo
En la misma aldea de Cabo Delgado. Camiseta con la figura de Bin Laden

Hasta hubo quien bautizó su automóvil con el nombre de Bin Laden. El de la fotografía siguiente resulta especialmente expresivo; aunque se aprecia con dificultad, podemos ver en el centro de la luna delantera un muñeco que representa a un hombre blanco, colgado de una soga: 

Cabo Delgado, norte de Mozambique. Un coche llamado Bin Laden.


El 11S conmocionó a la sociedad estadounidense. Por primera vez en su historia, sus enemigos atacaban el sagrado y protegido territorio patrio. La misma sociedad que había celebrado con júbilo y fervor patriótico el genocidio llevado a cabo el 6 de agosto de 1945 (con el lanzamiento de dos bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki), lloraba de dolor por los muertos del ataque contra las torres gemelas. Ironía de la Historia, los autores eran miembros de un movimiento (Al-Qaeda) que en buena parte había surgido de la chistera del imperio americano, para ser lanzado contra los soviéticos en Afganistán.

En Mozambique, el 11S fue vivido, tanto por cristianos como por musulmanes, como una especie de justicia divina contra el histórico abuso del hombre blanco. En este sentido, fue un símbolo que pasó a condensar significados profundos: colonialismo, explotación, imperialismo, riqueza frente a pobreza... Así de duro. La sociedad norteamericana nunca supo entender el odio que su país provocaba por numerosos rincones del mundo. Un odio acumulado en intervención imperialista tras intervención, barbarie tras barbarie, terror tras terror. Acabé entendiendo el sentido de "ahora le toca sufrir a los blancos" y de la complacencia social que levantó el atentado del 11S en Mozambique. El Imperio también sufre, también resulta golpeado. No importaban que los autores del atentado fuesen odiados moinhés

10 comentarios:

  1. Este debate, lo tuve ya con unos amigos el año pasado, con ocasión de los atentados de París, se encontraban conmocionados por lo sucedido, y les tuve que recordar los muertos que Europa y los USA, han producido en Libia, Siria, Irak, Afganistan etc, por no hablar de la enorme fosa común en la que hemos convertido el mare nostrum, o la desdicha de los desplazados por las guerras que nosotros promocionamos, que no viniesen ahora con lloros de fariseos, quien siembra vientos recoge tempestades.
    Lo peor del caso es que la clase trabajadora en occidente, tiene la percepción de que nuestros enemigos, son el resto de pueblos del mundo, es contra ellos contra los que hay que dirigir nuestro odio.
    Y eso, camarada, será muy difícil borrar de la conciencia colectiva, aunque tendremos que intentarlo con todas nuestras fuerzas.
    PD. Nos debes la crónica del último viernes del mes pasado.
    Salud

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. haremos un remix de los dos meses este último viernes de mes :)
      Salud

      Eliminar
    2. Muchas gracias, ya sabes que el humor es la terapia más saludable.
      Salud

      Eliminar
    3. "Hemos" ¿Tu estuviste bombardeando? Yo no, ni me siento responsable, es más lamento profundamente lo que hizo mi gobierno y otros muchos igual de asesinos SIN MI CONSENTIMIENTO NI MI APROBACIÓN, sin ni ni siquiera mi complicidad, ya que nunca les he votado.
      No es el pueblo quien merece ser castigado, pues no es el pueblo quien castiga, ni odia, ni ataca.
      Todos los pueblos deberían unirse contra esos que si lo hacen, no debemos fomentar el odio entre pueblos, ni aun al nuestro propio sin proponernoslo, debemos, tenemos la obligación, eso si de fomentar el odio de clase y la lucha contra los asesinos que nos dominan y son culpables de todo esto.

      Saludos.

      Eliminar
  2. Discrepo contigo, estimadx Piedra, ya que en muchas ocasiones, son nuestros propios compañerxs de trabajo, o nuestros vecinos los que odian a las personas que son diferentes, en ese sentido, yo he tenido un montón de debates con la gente de mi curro, y el pensamiento más fácil y primario, es que los emigrantes nos quitan el trabajo, y encima tienen más ayudas que nosotros.
    El último que tuve, sobre los refugiados, que se les ayudará, un compañero vino a decir que se fuesen a su país, lógicamente además de reprocharle su actitud, le dije que occidente, lo menos que podía hacer, después de haber incendiado esos países, era acogerlos con todas las consecuencias que se deriven de ese acto.
    Recibe un cordial saludo.

    ResponderEliminar
  3. Pero eso es debido a la enajenacion a las que nos someten desde los medios de manipulación hasta el mismo sistema educativo. Nos echan a pelear entre nosotros. Somos víctimas, no culpables.

    ResponderEliminar
  4. ¿Pensais hacer una entrado sobre lo ocurrido en Turquía y la respuesta de los políticos que al ver fracasado el golpe rápidamente mostraron su apoyo al sultan y su ``democracia´´?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No creo que podamos abordarlo por problemas de tiempo, pero desde luego es un tema de máxima importancia. Supongo que Mikel Itulain sacará algo en su blog; es un buen analista en temas de Oriente Medio. También es una pena que los de Voltairenet hayan suspendido sus publicaciones hasta el 15 de agosto; suelen tener muy buen ojo para analizar tales temas.

      Eliminar
    2. Acabo de leer esta entrevista con Kemal Okuyan (Partido Comunista Turco), que siempre puede añadir información y otros puntos de vista. A ver si podemos traducirla o si alguien se anima http://communismgr.blogspot.com.es/2016/07/kemal-okuyan-communist-party-turkey.html

      Eliminar
  5. Cada mes, el presidente USA Barack Obama autoriza la ejecución extrajudicial (eufemismo tras el que intentan enmascarar el premeditado y alevoso asesinato) de un número indeterminado de personas mediante la utilización de aviones no tripulados, los llamados drones.

    Habitualmente estos ataques con drones provocan la muerte de muchas otras personas que, inicialmente, no eran consideradas objetivos a abatir.

    La utilización de drones para esos fines (asesinar personas consideradas una amenaza para la seguridad USA) es una práctica que se inició durante la administración de Geroge W. Bush, pero es durante la administración Obama cuando la misma se ha vuelto más extensiva y sistemática.

    Difícil resulta calcular con un mínimo de exactitud el total de víctimas mortales provocadas por los ataques con drones autorizados por los presidentes USA, pero todos los datos publicados casi obligan a prever que se trata de varios miles, tal vez decenas de miles.

    A las víctimas mortales deben añadirse los heridos provocados durante los mismos ataques. El número de damnificados por los ataques con drones alcanza entonces proporciones propias de un conflicto bélico.

    ResponderEliminar

ROGAMOS QUE LOS COMENTARIOS SE AJUSTEN AL TEMA TRATADO. En la pág. FAQ (ver pestaña "FAQ" en el menú superior), en el punto 6 encontrarás las normas y criterios de aplicación para la publicación de comentarios. Subrayamos especialmente: no se aceptan comentarios que supongan una expresión de machismo, misoginia, sexismo, homofobia, racismo o xenofobia, y tampoco comentarios que supongan una apología, directa o indirecta, del fascismo en cualquiera de sus variantes.
Para contactar con el blog por otras cuestiones, más abajo figura una dirección de e-mail en formato de imagen.