14º aniversario del nacimiento de una nación.
20 de mayo de 2002. Acto de proclamación de la independencia de Timor Oriental. Izado de la bandera. Suena oficialmente por primera vez el himno nacional.
Una canción revolucionaria en la catedral de Santiago
Hace unos pocos años tuve la ocasión de dirigir la logística de un evento internacional centrado en la coordinación de la ayuda europea a Timor Oriental. Por tal motivo, una numerosa delegación timorense, con miembros del gobierno y de diferentes sectores sociales, se desplazó a Galicia. Consideré oportuno incluir una visita a la catedral de Santiago, como parte de los actos protocolarios. Confieso mi debilidad por las puestas en escena. Aquello me brindaba la oportunidad de crear una escenificación que provocara la efervescencia de las emociones y sentimientos, no solo de la delegación sino también y sobre todo del pueblo timorense, sabiendo que el acto sería grabado y difundido en la TV de Timor y que todo el país lo vería. Para ello planteé transformar el momento central del acto, el espectacular vuelo del botafumeiro de la catedral, en "algo más". Si hay algo que provoca estremecimiento emotivo entre los timorenses, es su himno nacional. Timor es un país pequeño, insignificante en el mundo, pero con un profundo y orgulloso sentimiento de identidad nacional. De manera que se me ocurrió que durante el espectáculo del vuelo del botafumeiro, un coro entonase el himno nacional de Timor, elemento imprescindible para crear tal apoteosis de las emociones.
Lógicamente aquello debía ser autorizado por el deán de la catedral de Santiago. Me pidió que le mandase la letra del himno y así lo hice. La respuesta fue que bajo ningún concepto aquella letra "subversiva" se cantaría en la catedral. Finalmente negociamos que el himno se cantaría, pero solo la primera estrofa, eliminando el resto. Sin embargo, el coro que había buscado y contactado (formado por un grupo de hombres y mujeres mayores) se había aprendido la letra entera, así que llegado el momento nos saltamos el pacto y se cantó el himno completo sin censura. Debió de ser la única vez en la historia de la catedral de Santiago en la que se cantó una canción revolucionaria en medio de un oficio religioso. Ni uno solo de los timorenses presentes pudo evitar las lágrimas y el momento fue luego difundido con detalle en la TV del país.
¿Qué tenía la letra que provocase el rechazo de la autoridad religiosa de la catedral? Muy sencillo. El problema estaba en estas estrofas:
Vencemos al colonialismo,
gritamos:abajo el imperialismo.
Tierra libre, pueblo libre,
no, no, no a la explotación.
Adelante unidos firmes y decididos.
En la lucha contra el imperialismo
el enemigo de los pueblos,
hasta la victoria final.
Por el sendero de revolución.
La crisis del 2006 y la "desestabilización sustentable".
Se cumple el 14º aniversario de la independencia de una pequeña pero gran nación. ¿Qué queda es esos deseos expresados en el himno nacional, de "lucha contra el imperialismo" y de "sendero de revolución"? Realmente nada. Toda una legión de asesores y consejeros de Naciones Unidas y de las diferentes agencias de cooperación de los países dominantes (cada alto funcionario tiene a su lado un asesor extranjero que le dice lo que tiene que hacer), se han encargado de que Timor asuma sin tapujos la vía del capitalismo, el sagrado credo de eso que llaman eufemísticamente "libre mercado", y además en su formato más sumiso a los intereses extranjeros. El FMI y el Banco Mundial marcan las coordenadas a seguir, y un manantial de dólares en las cuentas de una élite política corrupta, garantiza que el país no se desvíe un centímetro de la hoja de ruta impuesta. Timor Orienal es un caso más, quizás uno de los más recientes, de cómo un pueblo levantado contra el colonialismo, tras su independencia acaba siendo neocolonizado.
La esperanza del primer gobierno encabezado por el FRETILIN, tras la independencia, pronto se vio frustrada. En 2006 el país estuvo a punto de verse envuelto en una guerra civil. Fue el año en que pisé por primera Timor Lorosase, como se denomina al país en lengua tetun (Lorosase significa sol naciente, el Este, el Oriente).
Se ha escrito mucho sobre aquella crisis, que acabó provocando el grave problema de los desplazados y refugiados internos y una nueva intervención de Naciones Unidas. Pero, en general, lo que he leído al respecto echa balones fuera y oculta que en realidad fue una crisis provocada para derribar al gobierno del FRETILIN (Frente Revolucionario de Timor Oriental Independiente), la única esperanza de que el país siguiera no ya una vía socialista (impensable tras la desaparición del bloque socialista) pero sí al menos progresista. En su evolución ideológica, el FRETILIN finalmente es un partido que se define como izquierda socialdemócrata y pertenece a la Internacional Socialista. Pero aun así, es lo más a la izquierda que existe en Timor, además del Partido Comunista que es políticamente marginal.
No me cabe la menor duda de que existió una conspiración, un plan cuidadosamente diseñado en la crisis que comenzó en 2006, cuyo primer paso habían sido las movilizaciones callejeras contra el gobierno que la Iglesia Católica meses antes había puesto en marcha, enojada por el laicismo del gobierno del FRETILIN. Hubo una comunión de intereses que desestabilizó al país, llevándolo al borde la guerra civil; de intereses de la Iglesia, Australia y Estados Unidos.
No me cabe la menor duda de que existió una conspiración, un plan cuidadosamente diseñado en la crisis que comenzó en 2006, cuyo primer paso habían sido las movilizaciones callejeras contra el gobierno que la Iglesia Católica meses antes había puesto en marcha, enojada por el laicismo del gobierno del FRETILIN. Hubo una comunión de intereses que desestabilizó al país, llevándolo al borde la guerra civil; de intereses de la Iglesia, Australia y Estados Unidos.
Un amigo timorense, veterano de la que había sido una de las mayoes organizaciones de la resistencia, la RENITIL (Resistência Nacional dos Estudantes de Timor Leste), en una ocasión definía a la perfección la política australiana en la región: "los australianos juegan a provocar una desestabilización sustentable". Siempre me ha encantado esta definición de mi amigo, porque no solo define la política exterior australiana en la región, sino que también define lo que es la política exterior de EE.UU. en el mundo. No es casual que Australia sea el fiel aliado matón que EE.UU. tiene en Asia-Pacífico.
Timor Oriental es considerado por Australia como parte de su patio trasero, tanto que su intervención militar en 2006 tuvo lugar al margen de Naciones Unidas, ya que las tropas australianas no estuvieron bajo mandato de la misión militar de la ONU (lo cual provocó situaciones kafkianas, como por ejemplo la vez que casi se lían a tiros con los GNR portugueses -que sí estaban bajo mandato ONU- en el campo de refugiados del aeropuerto de Dili). Australia ejerce de matona macarra en los países pequeños de Asia Pacífico, pero rara vez sus intervenciones salen en la prensa occidental (por ejemplo, cuando Australia intervino militarmente en las Islas Salomón porque no le gustaba el partido que había ganado limpiamente las elecciones, ningún medio occidental recogió este hecho).
Vídeos: concierto callejero de las tropas australianas en Dili (28-7-2007), buscando generar empatía entre la población. En general, existe una fuerte animadversión hacia las tropas autralianas. Autoría: Vigne.
Petróleo, siempre el petróleo.
Como sucede tantas veces, el petróleo tuvo un papel decisivo en el proceso timorense previo y post independencia. El control y explotación de los yacimientos de hidrocarburos existentes entre la costa norte australiana y la costa sur de Timor, dibuja un fondo de conflicto mucho más decisivo de lo que se ha dicho. No es casual que Australia, que había respaldado la sanguinaria invasión de Timor por parte de Indonesia, se convirtiese en abanderada de la causa independentista cuando la explotación de los yacimientos de hidrocarburos en el mar de Timor (cuya existencia ya se conocía desde atrás) se convirtió en rentable. Según la legislación internacional, los derechos de explotación en aguas oceánicas, cuando hay dos países que los disputan, se establecen marcando la distancia de costa a costa. Australia ha aplicado una interpretación sui géneris, imponiendo que deben establecerse desde el comienzo de la plataforma continental de un país hasta el comienzo de la misma en el otro. ¿Por qué? Pues porque la plataforma continental australiana en el mar de Timor es muy extensa, mientras que la timorense es muy corta, de manera que de esta forma la mayor parte de los yacimientos quedan del lado australiano, en lugar de corresponderle la explotación a Timor Oriental. Aunque el litigio internacional está abierto, un diplomático occidental me comentaba: "se resolverá cuando se hayan agotado los yacimientos". Para Australia, obviamente no es lo mismo litigar con una potencia militar como Indonesia, que se había anexionado Timor Oriental, que tener que hacerlo con un país pequeño sin capacidad de defensa ni de intimidación. Y de pasar a celebrar la invasión indonesia de Timor que tuvo lugar a finales de 1975, Australia acabó siendo abanderada de su independencia. ¿Casualidades?
Cuba, viva Cuba.
¿Qué tiene que ver Cuba con Timor Oriental, me diréis? Pues tiene que ver muchísimo.
En este recuerdo con motivo del 14º aniversario de la independencia de Timor Oriental, quisiera mencionar una realidad que ha llegado a impactarme profundamente: la ayuda cubana. Me enoja e indigna que siempre que se habla de los países que hacen cooperación al desarrollo con Timor, nunca, jamás se menciona la que ha sido la cooperación más importante y decisiva: la cubana (como tampoco se habla del COMECON al hacer historia de la cooperación al desarrollo, pero es otro tema).
La cooperación cubana ha tenido dos ejes: educación y sanidad. Especialmente sobresaliente ha sido la ayuda en este último campo. Por no ponerme a buscar datos en mis archivos, permitidme que tire de memoria. Prácticamente el 99% de la asistencia médica en Timor ha sido dispensada por Cuba. Podemos afirmar que toda la medicina timorense ha sido cubana en su mayor parte. Ese esfuerzo no solo se ha centrado en la capital y en el resto de los núcleos urbanos, sino también en los distritos rurales. Llegué a encontrar médicos cubanos en lugares y sitios remotos de las montañas en donde las condiciones de vida eran realmente difíciles. Si duda es de los aspectos más emotivos que viví en Timor. Yo lo tengo claro: para mí esos médicos y médicas de Cuba son héroes y mi recuerdo siempre estará con ellos.
Cuba no solo ha dado a Timor Oriental la única red de asistencia médica existente en sus primeros años como país independiente. Lo más interesante y decisivo de la ayuda cubana, es que Cuba se ha preocupado de formar médicos timorenses para que la Sanidad del país no sea dependiente de la ayuda exterior. El gobierno cubano trasladó a Cuba a cientos de estudiantes timorenses para estudiar Medicina, pero también creó la única facultad de Medicina que hay en el país (en la UNTL, Universidade Nacional de Timor Lorosae), con profesores cubanos.
Cuento una anécdota. En tiempos recientes, hubo críticas por parte de la Iglesia a la formación de médicos timorenses en Cuba, e incluso lanzó una campaña para que se suspendiera. El motivo era que, según las autoridades de la Iglesia, los estudiantes timorenses en Cuba, a su regreso traían músicas y danzas obscenas (se referían a los ritmos y danzas caribeñas) que se propagaban entre la juventud, corrompiendo la moral de ésta al incentivar la lujuria. Como decimos los gallegos, ¡manda carallo!
Una miscelánea visual
Reproduzco, a modo de miscelánea visual, algunas fotografías de mi archivo. No están referenciadas, como me gusta hacer cuando reproduzco fotos en este blog. Pertenecen a un par de colecciones que me facilitaron durante mis estancias en Timor, pero por desgracia faltan las referencias documentales. Pertenecen a la época de la guerrilla del FRETILIN y de las FALINTIL durante la resistencia a la ocupación indonesia. Las FALINTIL fueron las Forças Armadas de Libertação e Independência de Timor-Leste (Fuerzas Armadas de Liberación e Independencia de Timor Oriental), el brazo armado del FRETILIN durante la lucha.
Son guerrilleros y guerrilleras que mantuvieron viva la esperanza durante años, refugiados en las montañas del país y librando una guerra desigual contra la poderosa máquina bélica indonesia. Podéis disponer de este material a vuestro antojo; lo único que os pedimos es que citéis tanto este blog como la entrada en calidad de fuente. Siendo no poder mencionar quiénes son los autores de las fotografías, pero es un dato que desconozco. La mayor parte de las fotos pertenecen, me parece recordar, al Museo Nacional de la Resistencia, en Dili.
[Nota: en este blog, hemos reproducido "Indonesia 1965: eliminando a Sukarno... y a otros 500.000", que es el capítulo 31 de Asesinando la esperanza, de William Blum. El epígrafe final está dedicado a la invasión de Timor. Puedes acceder pinchando en el enlace]
[Nota: en este blog, hemos reproducido "Indonesia 1965: eliminando a Sukarno... y a otros 500.000", que es el capítulo 31 de Asesinando la esperanza, de William Blum. El epígrafe final está dedicado a la invasión de Timor. Puedes acceder pinchando en el enlace]
Impresionante, lo del himno en la catedral tuvo que ser muy emotivo. Gracias por compartirlo.
ResponderEliminarCarlos M. Rojas lo ha dicho de manera justa y exacta: Impresionante el reportaje fotográfico por lo que significa e implica. Gracias.
ResponderEliminarLos del coro que se vayan aprendiendo la Internacional para cuando la cantemos en ese mismo lugar.
Voy a contar una batallita. Cercana la muerte del dictador Franco circulaba por Madrid y otros lugares de España una cinta magnética —casette, los más jóvenes pueden mirar en internet lo que fue— divulgada y vendida por la organización universitaria del PCE. En ella había fundamentalmente himnos y canciones revolucionarias. La policía se afanó un tiempo en encontrar esas cintas y destruirlas. A tanto llegó el asunto que incluso con motivo de algunas detenciones con el evidente posterior maltrato y manifestaciones de protesta, diarios de la época publicaron una nota —la misma en todos con leves matices— en la que se acusaba a los detenidos, entre otras cosas, de tener en su poder la susodicha cinta con himnos políticos, incluyendo la Internacional cantada por el coro del Liceo de Barcelona, durante el terror rojo, obligados por los anarquistas (sic) a punta de pistola. Estaban 'enteraos'.
ResponderEliminarAh..., el poder revolucionario de la música, de las letras de canciones cantadas con el corazón, con el cerebro y con el valor que da la certidumbre de la necesidad de la lucha.
The universal lesson of the courage of East Timor http://johnpilger.com/articles/the-universal-lesson-of-the-courage-of-east-timor
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