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ACLARACIÓN. El blogdelviejotopo no está relacionado con la revista El Viejo Topo. Pese a utilizar también la metáfora "viejo topo" en el nombre, el blog es completamente ajeno a la revista, cuya dirección es www.­elviejotopo.­com / Sobre el significado del término "viejo topo" en la tradición marxista, consúltese http://blogdelviejotopo.blogspot.com.es/2013/06/el-termino-viejo-topo-en-la-tradicion.html

domingo, 25 de octubre de 2015

Compañías militares privadas al servicio de la clase capitalista transnacional


Foto: neonazis ucranianos exhibiendo una bandera de la OTAN (fondo izquierda). Según algunas fuentes, unos 500 mercenarios de "Academi" (anteriormente "Blackwater") dieron asistencia militar al gobierno de Kiev, surgido del golpe de estado en el que los grupos neonazis ucranianos desempeñaron un papel decisivo (ver www.neopresse.com).
La participación de las CMP (empresas de seguridad privada y compañías militares privadas) en conflictos como los de Ucrania, Irak y Siria, hoy en día constituye un hecho probado. Peter Phillips nos habla en el artículo que sigue de estas CMP y su relación con la clase capitalista transnacional (CCT).


Referencia documental del artículo
Fuente original en inglés: Peter Phillips, "Private Military Companies in Service to the Transnational Capitalist Class", publicado en projectcensored.org el 20 de octubre de 2015.
Traducción al castellano para el blog del viejo topo: Vigne (25-10-2015), a partir de la versión en portugués publicada en resistir.info (20-10-2015), cotejándola parcialmente con el original en inglés.
Uso de esta traducción: licencia CC BY-SA. Reproducir ficha documental del principio, conservando los enlaces (hipervínculos) que figuran (tanto a este blog como a la fuente en inglés y versión en portugués).
Cambios: la negrita es nuestra. Imágenes: la viñeta es del texto en portugués de resistir.info; imagen de cabecera y texto pie de foto es añadido nuestro.


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Compañías militares privadas al servicio de la clase capitalista transnacional
Peter Phillips

[Nota editor del blog. Dos siglas para seguir el texto. CCT: clase capitalista transnacional. CMP: empresas de seguridad privada y compañías militares privadas]

La globalización del comercio y de la banca central impulsó las corporaciones privadas a posiciones de poder y control hasta niveles nunca antes vistos en la historia humana. Bajo el capitalismo avanzado, los requisitos estructurales de un retorno sobre la inversión exige de una expansión infinita del capital centralizada en manos de cada vez menos personas. El centro financiero del capitalismo global está tan altamente concentrada que menos de un millar de personas domina y controla una riqueza de 100 billones de USD [dólares americanos].

Los pocos miles de personas que controlan el capital global representan menos del 0,0001 por ciento de población mundial. Son la clase capitalista transnacional (CCT), que, como élite capitalista en el mundo, domina los estados-nación a través de los acuerdos comerciales internacionales y de las organizaciones transnacionales de los Estados, como el Banco Mundial, el Banco de Pagos Internacionales (BIS, sus siglas en inglés) y el Fondo Monetario Internacional.

La CCT expresa sus exigencias políticas a través de redes globales, como el G-7 y el G-20, y varias organizaciones políticas no gubernamentales, como el Foro Económico Mundial, la Comisión Trilateral y el Grupo Bilderberg. El CCT representa los intereses de varios cientos de miles de millonarios y multimillonarios que constituyen las personas más ricas, el 1 por ciento del nivel superior de la jerarquía de la riqueza del mundo.

La CCT es muy consciente tanto de su estatus de élite como de su creciente vulnerabilidad a los movimientos democráticos y los disturbios desde abajo. El imperio militar dominado por EE.UU. y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sirve para proteger las inversiones del CCT en todo el mundo. Las guerras, los cambios de régimen y ocupaciones realizadas al servicio del Imperio permiten el acceso de los inversores a los recursos naturales y sus ventajas especulativas en el mercado.

Cuando el Imperio se muestra lento para llevar a cabo sus planes o se enfrenta a la resistencia política, las empresas de seguridad privada y las compañías militares privadas (CMP) satisfacen cada vez más los requisitos de la CCT para la protección de sus activos. Estos servicios de protección incluyen seguridad personal para ejecutivos de la CCT y sus familias, la protección de las zonas residenciales y de trabajo, asesoramiento militar táctico y la formación de la policía nacional y las fuerzas armadas, la recopilación de informes de inteligencia sobre los movimientos democráticos y los grupos de la oposición, la adquisición de armas y gestión de los sistemas de armas y fuerzas de ataque para las acciones militares y asesinatos.

La crisis de la expansión de masas desesperadas/refugiados, fuerza de trabajo alienada y el agotamiento del medio ambiente significa una oportunidad ilimitada para que las CMP vendan sus servicios de protección a la élite mundial.

Logo de G4S
Se estima que más de 200.000 millones de $ (USD) al año son gastados en seguridad privada, la cual emplea a 15 millones de personas en todo el mundo. G4S es la CMP más grande del mundo, con 625.000 empleados en los cinco continentes, en más de 120 países. Nueve de las mayores empresas del mundo en gestión financiera tienen inversiones en G4S. Algunos de sus principales contratistas son los gobiernos del Reino Unido, EE.UU., Israel y Australia. En el sector privado G4S ha trabajado con empresas como Chrysler, Apple y Bank of America. En Nigeria, Chevron contrata a G4S para operaciones de contrainsurgencia, incluyendo mercenarios de reacción rápida. G4S realiza operaciones similares en el Sudán meridional y proporciona equipos de vigilancia a los puestos de control israelíes y también en las cárceles en Israel, además de participar en la seguridad de los asentamientos judíos en Palestina.

Otro contratista militar privado, Constellis Holdings - anteriormente Blackwater y Triple Canopy - es uno de principales proveedores de seguridad, apoyo militar y servicios de asesoramiento al gobierno de Estados Unidos, gobiernos extranjeros, corporaciones multinacionales y organizaciones internacionales. El Constellis es administrado por un consejo de administración que incluye al multimillonario Red McCombs, John Ashcroft, el ex fiscal general de EE.UU., al almirante retirado Bobby Inman y Jack Quinn, un consejero importante del Partido Demócrata que desempeñó tareas como jefe de gabinete del vicepresidente Al Gore y como asesor del presidente Clinton.

Cientos de contratistas militares privados ahora juegan un papel importante en la seguridad de la CCT, en la evolución neo-fascista del mundo corporativo en el siglo XXI. El capital tiene la libertad de viajar de inmediato a nivel internacional a cualquier lugar donde los beneficios sean posibles, mientras que los estados-nación se convierten en poco más que zonas de contención de la población con controles cada vez más represivos sobre la fuerza de trabajo. Por estas razones, las CMP deben entenderse como un componente del imperialismo neoliberal que ahora complementa el poder policial de los estados-nación, pero que finalmente podría terminar sustituyéndolo.

La tendencia a la privatización de la guerra es una grave amenaza para los derechos humanos, los derechos jurídicos y la transparencia y la responsabilidad democrática. El imperio militar EE.UU./OTAN establece las normas morales para la negación de los derechos humanos a través del uso de aviones no tripulados que matan a civiles sin respeto al derecho internacional, en varias regiones de la resistencia al Imperio. Etiquetar civiles muertos como insurgentes y terroristas, el completo desprecio por los procesos legales y los derechos humanos, desmiente cualquier punto de vista de la legitimidad moral del gobierno. Esta falta de legitimidad moral a su vez fija las normas para las empresas militares privadas que operan con la misma malicia en la sombra del imperio.

La globalización de las operaciones de las CMP codo a codo con la inversión de capital transnacional, los acuerdos comerciales internacionales y la creciente concentración de la riqueza en la CCT, significa que las prácticas represivas de seguridad privada y de la guerra, inevitablemente, acamparán a sus anchas en los EE.UU., la Unión Europea y en países del primer mundo. 

El 99 por ciento de nosotros estamos sin la riqueza y el poder de la policía privada frente a la amenaza de la represión abierta y la pérdida total de los derechos humanos y las protecciones legales. Vemos signos todos los días, con asesinatos cometidos por la policía (en la actualidad cerca de 100 al mes en los EE.UU.), escuchas electrónicas sin orden judicial, la encarcelación en masa, los puestos de control de tráfico aleatorios, listas de seguridad en los aeropuertos que prohíben, / exclusión de vuelo, enumera la marcha, elaboración de bases de datos de Seguridad Nacional con sospechosos de resistencia. 

Cada vez que nos negamos a ver los crímenes del Imperio, perdemos una parte de nuestra propia integridad. Ignorar la represión se convierte en una constante de nuestra vida diaria que lleva a un malestar moral y a un creciente sentimiento de impotencia. Debemos levantarnos y exigir transparencia democrática y supervisión internacional de los derechos humanos. A menos que desafiemos colectivamente al Imperio, acabaremos encontrándonos en un mundo que está evolucionando hacia una nueva era del totalitarismo neo-feudal como jamás antes habíamos conocido.

Peter Phillips
Peter Phillips es profesor de Sociología en la Sonoma State University (California) y presidente de Media Freedom Foundation/Project Censored].  Imparte docencia en materias como Media Censorship, Investigative Sociology, Sociology of Power, Political Sociology y Sociology of Media.
Si quieres acceder a la versión completa del artículo (pdf en inglés, 24 páginas), pulsa sobre este enlace:
Peter Phillips, Ray McClintock, Melissa Carneiro and Jacob Crabtree: "Twenty-First-Century Fascism. Private Military Companies in Service to the Transnational Capitalist Class"

11 comentarios:

  1. Las lindes entre regulares y mercenarios se han difuminado tanto que cada vez cuesta más establecerlas. ¿Qué son las 180 bases militares estadounidenses repartidas por el mundo sino comisarías de las grandes corporaciones? Ese totalitarismo neo-feudal que presagia Peter Phillips ya está aquí, que se consolide y se agudice o que se frene y sea vencido dependerá fundamentalmente de la resistencia que se le oponga. Tal vez de ese 15% de masa crítica militante y concienciada que en alguna ocasión has apuntado.

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  2. Esto es escandaloso. Están privatizando hasta las guerras.
    Pero hay mucho más.
    Con motivo de la primera muerte en Irak de un soldado estadounidense después de casi cinco años, en El Mundo del viernes 23 de octubre venía la noticia de: “El muerto sin nombre 4.494”
    Venían estos párrafos:
    Ayer, Hickman perdió el triste privilegio de ser el último soldado estadounidense muerto en Irak. La nueva víctima mortal es, también, un ejemplo de la nueva guerra en ese país, y del estilo de Barack Obama en política de defensa. El muerto 4.494 de Estados Unidos no tiene nombre. Tampoco se sabe cuál era su unidad. Sólo que pertenecía a las Fuerzas Especiales, es decir, las unidades secretas o semisecretas que empezaron a expandirse después de los atentados del 11-S y que ahora constituyen la columna vertebral de la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo islámico. Una guerra que ya no recibe ese nombre, pero que continúa igual que en la era de George W. Bush. Así pues, el soldado muerto no parecía pertenecer a las aproximadamente 3.400 militares que Estados Unidos tiene en Irak ayudando a que el Gobierno de Bagdad -o a lo que queda de él- resista al Estado Islámico (IS, según sus siglas en inglés). Las Fuerzas Especiales entran y salen constantemente de los países, y operan, en total, en 135 Estados, es decir, dos tercios de todas las naciones de la Tierra, siempre en secreto.
    Hickman era el anterior muerto. Y lo escandaloso es que estas Fuerzas Especiales salen, entran y operan libremente en 135 estados, en teoría soberanos.
    Además de drones y de cosas secretas que no sabemos.

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  3. es el fascismo del siglo XXI está claro

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  4. Reproduzco algún párrafo sacado de "¿Después del Tercer Mundo? Los fracasos de la modernidad y el advenimiento de la globalidad imperial" (http://blogdelviejotopo.blogspot.com.es/2013/09/despues-del-tercer-mundo-los-fracasos.html):

    "El resultado es un nuevo tipo de fascismo social como “un régimen social y civilizacional” (Santos, 2002: 435). Paradójicamente, este régimen coexiste con sociedades democráticas, de ahí su novedad. Este fascismo opera de varios modos: en términos de exclusión espacial; los territorios por los cuales luchan actores armados; el fascismo de la inseguridad; y, por supuesto, el fatal fascismo financiero, el cual en ocasiones dicta la marginación de regiones y países enteros que no cumplen las condiciones requeridas para el capital como lo estipulan el FMI y sus fieles asesores en gestión (Santos, 2002: 447-458)."

    "El nuevo imperio opera no tanto a través de la conquista, sino más bien a través de la imposición de normas (libres-mercados, democracia y nociones culturales de consumo al estilo estadounidense, y otros). El anteriormente denominado Tercer Mundo es, ante todo, el teatro de una multiplicidad de pequeñas guerras crueles que, en lugar de ser un regreso a la barbarie de antaño, están vinculadas a la actual lógica global. Desde Colombia y Centro América a Argelia, África Subsahariana y el Oriente Medio, estas guerras toman lugar en Estados o regiones que no amenazan al imperio pero, en cambio, fomentan condiciones favorables para éste. Para gran parte del anteriormente denominado Tercer Mundo (y por supuesto para el Tercer Mundo dentro del núcleo) se ha reservado “el Caos-mundial” (Joxe, 2002: 107), la esclavitud de libre mercado y genocidio selectivo. En algunos casos esto llega a conformar una suerte de “paleo-micro-colonialismo” dentro de las regiones (Joxe, 2002: 157), en otros una balcanización, y aun en otros brutales guerras internas y desplazamientos masivos con el propósito de abrir regiones enteras para el capital transnacional (particularmente en el caso del petróleo, pero también en el de los diamantes, la madera, el agua, los recursos genéticos y terrenos cultivables). Estas pequeñas guerras crueles con frecuencia son estimuladas por redes mafiosas y tienen como objetivo la globalización macro-económica."
    .
    -- Sugiero leer el texto entero

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  5. "un fascismo que nunca pronuncia su nombre", dice John Pilger :-)
    http://blogdelviejotopo.blogspot.com.es/2015/10/el-acto-revolucionario-de-contar-la_8.html

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  6. Ya en 2012, Peter Phillips y Kimberly Soeiro publicaban un artículo muy interesante, traducido al castellano: "660 individuos y 147 corporaciones controlan la economía mundial", en:
    https://elfeniciodigital.wordpress.com/2012/11/08/660-individuos-y-147-corporaciones-controlan-la-economia-mundial/
    Creo que circula en castellano en más sitios.

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  7. http://www.voltairenet.org/article188845.html
    Podría titularse "Políticos privados al servicio del ESTADO GLOBAL PROFUNDO".

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  8. Si, siempre es el "Fascismo" el culpable, incluso después de muerto y destruido. No hay más ciego que quien no quiere ver.

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    1. ¿El Fascismo "muerto y destruido"? ¡¡Uff!! Aquí en el planeta Tierra, desde luego no.

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    2. En lo segundo, Anónimo, tienes razón. En lo segundo.

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  9. No son las únicas "armas de Guerra" del tercer milenio. Hay un arsenal de "innovaciones-rancias".
    https://tenacarlos.wordpress.com/2015/10/29/trafico-de-drogas-en-el-ejercito-espanol-hecho-aislado-o-problema-sistemico-por-quique-badia/
    Si los juzgásemos por sus actos, y no por sus intenciones (los actos son hechos, las intenciones suelen ser cuentos) ...
    La Ilegalización de las drogas supone un inmenso chorro diario de billetes de 500 pavos que nutren a los más sádicos; a los asesinos, a los pistoleros, a los secuestradores, a las mafias. A los que compran Jueces, policías y políticos.
    Al menos, con la ilegalización, las drogas han desaparecido ... es broma. En realidad, no han desaparecido ni en las cárceles, vigiladas por funcionarios y guardias civiles "cuerpo a cuerpo".
    Imagina un traficante con visión empresarial, que viene a sustituir a los antiguos artesanos como Oubiña o los Charlines. Imagínate la rentabilidad de tal "empresa".
    Ahora imagínate que esa "empresa" tiene manga ancha para establecer sucursales en cualquier estado del mundo. El blanqueo de dinero resulta imparable. Igual que la cuenta de resultados de la empresa en cuestión. Free taxes.
    Imagínate que los tipos más ricos del mundo son esos empresarios. Que son amiguitos.
    Imagínate.
    O mira.
    De 2001: Un contenedor expedido desde Perú dirigido a Inditex llevaba dentro 26 kilos de cocaína.
    http://www.lavozdegalicia.es/hemeroteca/2001/03/16/471731.shtml
    De 2005: Un contenedor expedido desde Perú dirigido a Inditex llevaba dentro 125 kilos de cocaína
    http://www.20minutos.es/noticia/75124/0/llevaba/dentro/cocaina/
    ***
    Y, para ello, más de dos terceras partes de los presos españoles lo son por ser víctimas de la drogadicción. Y un porcentaje mayor lo son indirectamente.
    ¿Recordáis a Tierno el del rostro Galvanizado y su "movida" de exaltación cuasireligiosa de de la droga?
    Porque ahora, os alerto, VUELVE A HEROÍNA. Ya son decenas los abogados penalistas que me lo aseguran alarmadísimos. Y nosotros sin enterarnos.
    La juventud se mete en política. Toca una de drogas y yonkis. Más sensación de inseguridad: menos libertades.
    Si, es la guerra. Más madera!!

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