Miembros de la organización MOVE en Filadelfia |
''¿Dejar caer una bomba en una zona residencial? Nunca en mi vida he visto algo así. Es como Vietnam" (Steve Harmon, residente en la zona, citado en New York Times 14-5-1985)
"Ese día los miembros de MOVE murieron. La ciudad también murió. Sus políticos murieron, sus medios de comunicación murieron, murieron sus tribunales, y sus iglesias y lugares de culto murieron, porque dejaron de funcionar y sirvieron al Poder y al Dinero. En un sentido muy real, la ciudad masacrada en sí por la fe en tales instituciones, murió. Se convirtió en vacío, hueco y muerto" (Mumia Abu-Jamal, cuando se encontraba en el corredor de la muerte en espera de su ejecución).
Los hechos...
Filadelfia, Pensilvania, 13 de Mayo, 1985. La policía lanza un operativo para desalojar a miembros de una comunidad afroamericana de la organización MOVE del edificio que ocupaban. Desde un helicóptero se lanza una bomba que además de la explosión provoca un incendio que acaba destruyendo toda una manzana de casas. Expresamente los responsables del operativo impidieron la intervención de los bomberos. En total, 65 viviendas resultan destruidas y 11 personas resultan muertas, entre ellos 5 niños pequeños de edades entre 7 y 13 años. La policía, la oficina del alcalde y el FBI estuvieron involucrados en un acto al que solo se le puede calificar de terrorismo policial.
Hoy 13 de mayo se cumplen 32 años de una barbarie, de un acto de terrorismo cometido por fuerzas policiales contra la organización afroamericana MOVE en Filadelfia. Sorprende la mala memoria (amnesia en muchos casos) que tenemos ante hechos pretéritos como el que mencionamos. Acaso una de las fortalezas de la dominación ideológica del capitalismo es formatear nuestro recuerdo para borrar todo aquello que resulta incómodo, o alterarlo, tergiversarlo, reescribirlo otras veces de forma que la realidad y lo recordado dejan de parecerse, como si se hubiese inventado el pasado de la nada para que nuestra conciencia aburguesada pueda digerirlo sin esfuerzo.
Recordar lo sucedido en Filadelfia aquel día de la primavera de 1985, nos sirve también de disculpa para reflexionar sobre las contradicciones "clase, raza y poder", que se mantienen más que nunca en la América actual, como decía Tim Grierson al escribir sobre Let The Fire Burn (Deja que arda el fuego), el documental realizado en 2013 por Jason Osder sobre los sucesos ocurridos (añádase a "clase" y "raza" el "género", y tendremos los tres vértices del triángulo de la discriminación y opresión del que hablaba Angela Davis).
El MOVE fue un grupo de liberación afroamericana fundado por John África (Vicente Leaphart) en 1972. Luchaba contra el racismo y la brutalidad policial sobre todo, pero una de sus características fue que sus miembros optaban por vivir en comunas urbanas pretendidamente alternativas, y esto acabará siendo una fuente de conflictos con las autoridades. El MOVE fue uno de tantos grupos surgidos en las décadas de 1960 y 1970, durante el auge del movimiento reivindicativo afroamericano y también de la llamada contracultura. Fueron grupos los de aquella época que se ajustaron a coordenadas ideológicas de lo más variopintas, con el común denominador de focalizar la atención sobre la discriminación racial. La mayoría de ellos no alcanzaron el nivel de interés ideológico, organizativo y político que sí tuvo, por ejemplo, Panteras Negras. En el caso del MOVE sus orígenes estuvieron en el movimiento cristiano, pero poco a poco parece radicalizarse a raíz de enfrentamientos con la policía.
En 1978, la policía intentó desalojar a miembros del MOVE de una de sus comunas en Filadelfia. Acabó produciéndose un tiroteo en el que murió un policía en circunstancias nunca suficientemente aclaradas del todo. Nueve integrantes del MOVE fueron llevados a juicio y condenados a 100 años de cárcel por asesinato en tercer grado. Lo cierto es que la muerte del policía abatido colocó al MOVE en el punto de mira de la represión policial. La condena de nueve de sus miembros en el juicio estuvo cargada de polémica, con un fallo judicial cuestionable: no solo porque no quedó claro cómo fue la muerte del policía, sino que suponiendo que hubiera sido un integrante del MOVE lo habría matado una persona, no nueve, pero los nueve fueron condenados por asesinato. La Justicia en EE.UU. jamás ha existido para los negros socialmente excluidos y expulsado a los márgenes del sistema (en realidad, la Justicia del orden burgués solo existe para que el tenga dinero y pueda comprarla). El caso es que aquello contribuyó a radicalizar al resto del grupo. A partir de ahí, las autoridades aprovechaban cualquier disculpa para emitir órdenes de búsqueda y captura contra sus integrantes. Al mismo tiempo, el alcalde de Filadelfia, W. Wilson Goode y el jefe de policía Gregore J. Sambor, consiguieron que el movimiento fuese clasificado como organización terrorista y que el FBI se interesase. Curiosamente, Wilson Goode era negro; fue el primer alcalde negro de Filadelfia y había ganado las elecciones apelando a la polarización racial.
En 1985, cuando se produjo el bárbaro suceso del ataque policial en Filadelfia contra una comuna del MOVE, en cierto sentido fue algo que se veía venir. Hacía ya hacía tiempo que las autoridades políticas y policiales y el FBI habían consensuado que era preciso acabar con el MOVE a cualquier precio. Y el precio que pagaron fue, desde luego, muy alto.
Una de las comunas del MOVE estaba ubicada en un edificio de Osage Avenue en Filadelfia. Aquel lunes, 13 de mayo de 1985, la policía había recibido instrucciones para desalojarlos y detener a los miembros de la comunidad. Tras producirse un intercambio de disparos, según fuentes policiales, el jefe de policía Gregore J. Sambor ordenó el bombardeo del edificio. Para ello se recurrió a un helicóptero de la Policía Estatal de Pensilvania, desde el cual fue arrojada una bomba suministrada por el FBI con C4, un potente explosivo militar. La explosión provocó un incendio y la policía impidió la intervención de los bomberos argumentando que podían ser objeto de disparos. El incendio se extendió a toda la manzana y acabó destruyendo 65 viviendas: 250 personas se quedaron sin hogar. 11 personas murieron, entre ellas 5 niños de 7 a 13 años. Una de las dos personas que consiguieron sobrevivir, Ramona África, declaró que la policía disparó a contra los que trataban de escapar del edificio en llamas:
La alcaldía de Filadelfia tuvo que aceptar que se crease una comisión de investigación, cuyo informe final denunciaba las acciones emprendidas por el gobierno de la ciudad, afirmando que "dejar caer una bomba en una casa de la manzana ocupada era inconcebible". Sin embargo, nadie del gobierno de la ciudad fue acusado penalmente. Años después, en 1996, un jurado federal condenó al gobierno de la ciudad a pagar una indemnización a la superviviente Ramona África y a los familiares de otros fallecidos.
En 2013 se estrenó el documental Let the Fire Burn, dirigido por Jason Osder. El título hace mención a la decisión de las autoridades de impedir la intervención de los bomberos y permitir que el fuego destruyese la manzana.
Apostilla
Aunque no tiene nada que ver con MOVE y los sucesos de Filadelfia, os recomiendo ver la serie The Wire, una excelente reconstrucción de los contextos de marginalidad y exclusión que caracterizan la vida del lumpen afroamericano en la ciudad de Baltimore. La serie transmite una idea tremendamente realista: si eres negro y has tenido el infortunio de nacer en determinado ambiente social, hagas lo que hagas en tu vida, estás condenado, no tienes escapatoria. Desde mi punto de vista, la mejor (o al menos una de las mejores) series de TV que he visto. @VigneVT
Fuentes consultadas
AA.VV., "25 Years Ago: Philadelphia Police Bombs MOVE Headquarters Killing 11, Destroying 65 Homes" (13-5-2010)
Tim Grierson: "Let The Fire Burn" (20-4-2013) Bunthay Cheam: "Goode, Wilson (1938-)"
William K. Stevens: "Police drop bomb on radicals home in Philadelphia", en New York Times (14-5-1985)
Sam Roberts: "Phil Africa, of Black-Liberation Group Move, Long in Prison, Dies at 59", en New York Times (14-1-2015)
Christina Coleman: "11 Things You Didn’t Know About The Time Police Bombed An American Neighborhood (LIST)"
npr.org: "'Let The Fire Burn': A Philadelphia Community Forever Changed" (25-6-2013)
William Stevens: "Goode Offers His Apology For Move" (10-3-1986)
Craig R. McCoy:"Who was John Africa?" (23-4-2010)
revcom.us: "El bombardeo de MOVE de 1985: Nunca olvidar, nunca perdonar" (30-5-2010)
Cimarrón Ediciones, blog: "Agosto Negro: La Historia de MOVE" (12-8-2014)
Filadelfia, Pensilvania, 13 de Mayo, 1985. La policía lanza un operativo para desalojar a miembros de una comunidad afroamericana de la organización MOVE del edificio que ocupaban. Desde un helicóptero se lanza una bomba que además de la explosión provoca un incendio que acaba destruyendo toda una manzana de casas. Expresamente los responsables del operativo impidieron la intervención de los bomberos. En total, 65 viviendas resultan destruidas y 11 personas resultan muertas, entre ellos 5 niños pequeños de edades entre 7 y 13 años. La policía, la oficina del alcalde y el FBI estuvieron involucrados en un acto al que solo se le puede calificar de terrorismo policial.
*
Hoy 13 de mayo se cumplen 32 años de una barbarie, de un acto de terrorismo cometido por fuerzas policiales contra la organización afroamericana MOVE en Filadelfia. Sorprende la mala memoria (amnesia en muchos casos) que tenemos ante hechos pretéritos como el que mencionamos. Acaso una de las fortalezas de la dominación ideológica del capitalismo es formatear nuestro recuerdo para borrar todo aquello que resulta incómodo, o alterarlo, tergiversarlo, reescribirlo otras veces de forma que la realidad y lo recordado dejan de parecerse, como si se hubiese inventado el pasado de la nada para que nuestra conciencia aburguesada pueda digerirlo sin esfuerzo.
Recordar lo sucedido en Filadelfia aquel día de la primavera de 1985, nos sirve también de disculpa para reflexionar sobre las contradicciones "clase, raza y poder", que se mantienen más que nunca en la América actual, como decía Tim Grierson al escribir sobre Let The Fire Burn (Deja que arda el fuego), el documental realizado en 2013 por Jason Osder sobre los sucesos ocurridos (añádase a "clase" y "raza" el "género", y tendremos los tres vértices del triángulo de la discriminación y opresión del que hablaba Angela Davis).
El MOVE fue un grupo de liberación afroamericana fundado por John África (Vicente Leaphart) en 1972. Luchaba contra el racismo y la brutalidad policial sobre todo, pero una de sus características fue que sus miembros optaban por vivir en comunas urbanas pretendidamente alternativas, y esto acabará siendo una fuente de conflictos con las autoridades. El MOVE fue uno de tantos grupos surgidos en las décadas de 1960 y 1970, durante el auge del movimiento reivindicativo afroamericano y también de la llamada contracultura. Fueron grupos los de aquella época que se ajustaron a coordenadas ideológicas de lo más variopintas, con el común denominador de focalizar la atención sobre la discriminación racial. La mayoría de ellos no alcanzaron el nivel de interés ideológico, organizativo y político que sí tuvo, por ejemplo, Panteras Negras. En el caso del MOVE sus orígenes estuvieron en el movimiento cristiano, pero poco a poco parece radicalizarse a raíz de enfrentamientos con la policía.
En 1978, la policía intentó desalojar a miembros del MOVE de una de sus comunas en Filadelfia. Acabó produciéndose un tiroteo en el que murió un policía en circunstancias nunca suficientemente aclaradas del todo. Nueve integrantes del MOVE fueron llevados a juicio y condenados a 100 años de cárcel por asesinato en tercer grado. Lo cierto es que la muerte del policía abatido colocó al MOVE en el punto de mira de la represión policial. La condena de nueve de sus miembros en el juicio estuvo cargada de polémica, con un fallo judicial cuestionable: no solo porque no quedó claro cómo fue la muerte del policía, sino que suponiendo que hubiera sido un integrante del MOVE lo habría matado una persona, no nueve, pero los nueve fueron condenados por asesinato. La Justicia en EE.UU. jamás ha existido para los negros socialmente excluidos y expulsado a los márgenes del sistema (en realidad, la Justicia del orden burgués solo existe para que el tenga dinero y pueda comprarla). El caso es que aquello contribuyó a radicalizar al resto del grupo. A partir de ahí, las autoridades aprovechaban cualquier disculpa para emitir órdenes de búsqueda y captura contra sus integrantes. Al mismo tiempo, el alcalde de Filadelfia, W. Wilson Goode y el jefe de policía Gregore J. Sambor, consiguieron que el movimiento fuese clasificado como organización terrorista y que el FBI se interesase. Curiosamente, Wilson Goode era negro; fue el primer alcalde negro de Filadelfia y había ganado las elecciones apelando a la polarización racial.
En 1985, cuando se produjo el bárbaro suceso del ataque policial en Filadelfia contra una comuna del MOVE, en cierto sentido fue algo que se veía venir. Hacía ya hacía tiempo que las autoridades políticas y policiales y el FBI habían consensuado que era preciso acabar con el MOVE a cualquier precio. Y el precio que pagaron fue, desde luego, muy alto.
Una de las comunas del MOVE estaba ubicada en un edificio de Osage Avenue en Filadelfia. Aquel lunes, 13 de mayo de 1985, la policía había recibido instrucciones para desalojarlos y detener a los miembros de la comunidad. Tras producirse un intercambio de disparos, según fuentes policiales, el jefe de policía Gregore J. Sambor ordenó el bombardeo del edificio. Para ello se recurrió a un helicóptero de la Policía Estatal de Pensilvania, desde el cual fue arrojada una bomba suministrada por el FBI con C4, un potente explosivo militar. La explosión provocó un incendio y la policía impidió la intervención de los bomberos argumentando que podían ser objeto de disparos. El incendio se extendió a toda la manzana y acabó destruyendo 65 viviendas: 250 personas se quedaron sin hogar. 11 personas murieron, entre ellas 5 niños de 7 a 13 años. Una de las dos personas que consiguieron sobrevivir, Ramona África, declaró que la policía disparó a contra los que trataban de escapar del edificio en llamas:
Los adultos empezaron a gritarles que estamos saliendo, estábamos llevando a los niños. (...) Y sabemos que la policía nos escuchó. Pero en el instante, el instante en que estábamos visibles para ellos tratando de salir, inmediatamente abrieron fuego. (...) Nos obligaron de nuevo a volver a aquel infierno en llamas, varias veces. [Fuente]Esta versión fue corroborada más tarde por la comisión de investigación.
Gregore J. Sambor, jefe de la policía de Filadelfia |
La alcaldía de Filadelfia tuvo que aceptar que se crease una comisión de investigación, cuyo informe final denunciaba las acciones emprendidas por el gobierno de la ciudad, afirmando que "dejar caer una bomba en una casa de la manzana ocupada era inconcebible". Sin embargo, nadie del gobierno de la ciudad fue acusado penalmente. Años después, en 1996, un jurado federal condenó al gobierno de la ciudad a pagar una indemnización a la superviviente Ramona África y a los familiares de otros fallecidos.
En 2013 se estrenó el documental Let the Fire Burn, dirigido por Jason Osder. El título hace mención a la decisión de las autoridades de impedir la intervención de los bomberos y permitir que el fuego destruyese la manzana.
Let The Fire Burn, Official Trailer (2013) - Documentary
*
“La violencia está dirigida hacia nosotros. No eres violento cuando te defiendes. Por lo contrario, eres violento si permites que alguien te ataque y no respondes. En este caso, estás alentando la violencia. Estás respaldando la violencia. Eres masoquista. Atraes el dolor y el sufrimiento.” (Ramona África, una de las dos supervivientes del ataque policial)___________
Apostilla
Aunque no tiene nada que ver con MOVE y los sucesos de Filadelfia, os recomiendo ver la serie The Wire, una excelente reconstrucción de los contextos de marginalidad y exclusión que caracterizan la vida del lumpen afroamericano en la ciudad de Baltimore. La serie transmite una idea tremendamente realista: si eres negro y has tenido el infortunio de nacer en determinado ambiente social, hagas lo que hagas en tu vida, estás condenado, no tienes escapatoria. Desde mi punto de vista, la mejor (o al menos una de las mejores) series de TV que he visto. @VigneVT
Fuentes consultadas
AA.VV., "25 Years Ago: Philadelphia Police Bombs MOVE Headquarters Killing 11, Destroying 65 Homes" (13-5-2010)
Tim Grierson: "Let The Fire Burn" (20-4-2013) Bunthay Cheam: "Goode, Wilson (1938-)"
William K. Stevens: "Police drop bomb on radicals home in Philadelphia", en New York Times (14-5-1985)
Sam Roberts: "Phil Africa, of Black-Liberation Group Move, Long in Prison, Dies at 59", en New York Times (14-1-2015)
Christina Coleman: "11 Things You Didn’t Know About The Time Police Bombed An American Neighborhood (LIST)"
npr.org: "'Let The Fire Burn': A Philadelphia Community Forever Changed" (25-6-2013)
William Stevens: "Goode Offers His Apology For Move" (10-3-1986)
Craig R. McCoy:"Who was John Africa?" (23-4-2010)
revcom.us: "El bombardeo de MOVE de 1985: Nunca olvidar, nunca perdonar" (30-5-2010)
Cimarrón Ediciones, blog: "Agosto Negro: La Historia de MOVE" (12-8-2014)
Wikipedia (edición en inglés): "Let the Fire Burn", "MOVE", "John Africa" y otras de forma secundaria.
No tenía ni idea de ésta tragedia, es terrible. Y ocurrió hace poco. Los que fueron a la cárcel por aquel policía, permanecen/permanecieron allí?
ResponderEliminarSiete de los 9 empezaron a pedir la libertad condicional en 2008, pero se les niega una y otra vez y siguen en prisión. De los otros dos, Merle Africa murió en la cárcel en 1998 y Phil Africa murió también en la cárcel hace dos años.
EliminarLa Historia de MOVE: 35 años en movimiento (VOSE) https://www.youtube.com/watch?v=_DgU6njT8HE
ResponderEliminarRacismo, odio, supremacismo ario, fascismo en la vida cotidiana... Un familiar que ha vivido dando clases en institutos del Sur estadounidense durante más de 30 años, me cuenta cuando viene a España todo tipo de situaciones que incluso en este régimen franquista disfrazado nos parecerían casi imposibles, demenciales, rallanas en la locura del sistema y de las gentes, gobernantes y gobernados. Cualquier jefe de policía que quiera ser re-elegido (muchos son directamente contratados, no elegidos mediante voto, tal y como parece desprenderse de las películas made in USA que vemos en la TV) tiene que satisfacer los instintos de sus conciudadanos blancos —da igual que el tipo sea negro o descendiente de chicanos— y reproducir, para que todos estén seguros de su lealtad y demostrar que es fiable ante el posible enemigo, las ideas que se hacen patentes en el ecosistema físico y social en el que viven. Palizas tremendas a los jóvenes negros y latinos que se desmandan con el alcohol los fines de semana, hacerle la vida imposible a aquellos que, aún siendo blancos, llevan una rutina social distinta a la del resto de la comunidad, impedir el desarrollo de los más mínimos embriones de sindicatos, asociaciones culturales, clubes de discusión política distintos de lo socialmente adoptado, desbaratar posibles iniciativas de ayuda mutua, de solidaridad no basada en la caridad y similares propios de las iglesias cristianas... Y por supuesto, mano dura con los que no son de 'los nuestro'. Dios, patria, dinero, capitalismo montaraz en las raíces más básicas y elementales del profundo Sur, que me temo no son distintas a las de todos loa EEUU, salvo algunas grandes ciudades.
ResponderEliminar